A una semana del femicidio de Guadalupe Medina, la niña de 12 años abusada y estrangulada en una casilla de Villa Banana, organizaciones sociales y barriales se concentraron en Tribunales en reclamo de justicia y para acusar a la policía de "proteger" a los acusados. Al mismo tiempo, desde la Fiscalía se anunció que uno de los buscados por el hecho, Mauricio "Chueco" Chara, se presentó en la defensoría Nº 10 y quedó detenido. Se trata de uno de los acusados junto con Gustavo Rodrigo "Wititi" Berón, que permanece prófugo. Chara tenía pedido de captura desde el año pasado, por no regresar de una salida transitoria en una condena a cuatro años y medio por un hecho de robo calificado de 2011. Los acusados son integrantes de la "banda del Pandu", cuyo líder está preso por el crimen de Javier Barquilla, perpetrado en febrero de 2015. Hoy, el Chueco será imputado por "abuso sexual seguido de muerte", en el caso de Guadalupe. Más temprano, Pascual Duarte, coordinador de la Unidad Barrial, se quejó en la movilización: "Los que asolan el barrio son los mismos que ahora están implicados en la muerte de la niña". Y agregó: "El fiscal Ademar Bianchini le quiere dar a Pandu un juicio abreviado, cuando se sabe que desde la cárcel comanda la banda. Empezó pidiendo 28 años y ahora quiere abreviar por 12 o 14 años, para Pandu; como ya abrevió con Wititi".

La banda de "Los Cuatreros" tuvo su lugar en las crónicas policiales de fines de 2014, cuando se empezaron a denunciar los casos de hostigamiento contra los vecinos, a quienes sacaban de sus casillas para instalar kioscos de droga. Esa situación provocó el crimen de Barquilla, el año pasado, cuando intentó defender a un vecino. Así, Wititi y Pandu cayeron presos. El segundo como principal acusado por el crimen de Barquilla; y el primero como partícipe. Sin embargo, el fiscal Bianchini cerró un juicio abreviado con Berón: le dio tres años de prisión por el delito de amenazas, pero como tenía cumplidos los ocho meses, lo dejó en libertad y volvió al barrio. "Al fiscal le decimos que el hecho de que tenga un recurso tan pobre para darle tan pocos años a un acusado quiere decir que es co-responsable de todo lo que hizo Wititi después", dijo Duarte.

Al mismo tiempo, el hombre señaló que denunciaron el accionar policial porque "no se protegió a la familia, sino a los acusados. Está bien que (el ministro de Seguridad, Maximiliano) Pullaro reaccione, pero queremos que caiga la responsabilidad de las comisarías 13º y 19º, porque sino vamos a seguir con el mismo problema. Y le decimos al ministro que el problema lo tiene en la policía, porque son ellos los que entregan las armas, la droga, los protegen y encima nos pegan a nosotros".

Tras esa movilización, la Fiscalía confirmó la detención del Chueco, sobre quien había un pedido de captura desde mayo del año pasado, cuando no regresó de una salida transitoria, al mes de que le concedieran ese beneficio, en una causa por robo con arma.

En la causa, también hay un menor detenido. Gabriel Q., fue arrestado el lunes y la jueza de Menores, Dolores Aguirre Guarrochena, espera el resultado de pericias claves. En el barrio sostienen que el joven es "un perejil".

En tanto, la familia de Guadalupe menciona como implicada a Jessica V., quien se presentó ayer por pedido del fiscal para realizarse análisis clínicos y de ADN. En ese momento, adelantó que su pareja, el Chueco, se presentaría. A la mujer y a su hermana, Romina --esposa del Pandu-- se les formó causa por amenazas porque varios vecinos declararon que luego del crimen de Guadalupe, en la noche misma del velorio, intimidaron a la gente del barrio con armas, dentro de un pasillo. Les dijeron que no se atrevieran a denunciarlos.

El rumor en el barrio era insistente: Jessica habría filmado las violaciones. Aseguran que había un tema de celos con Guadalupe, y también mencionan que hubo algún conflicto relacionado con la venta de drogas. También en el barrio se decía ayer que Wititi y Jessica habían sido apresados, pero el fiscal desmintió esa información.

Romina estaba en prisión domiciliaria, porque tiene una causa por robo en la que está acusada con su marido. Esa investigación por amenazas quedó en manos de la fiscal Valeria Haurigot, quien pedirá la revocatoria de la domiciliaria de Romina, por incumplimiento.