En una medida muy esperada por la comunidad del Normal Nº 1, el delegado zonal del Ministerio de Educación provincial, Humberto Cancela, indicó ayer que la investigación por el caso del ex alumno Juan Pablo Calandria, quien fuera demandando civil y penalmente por su profesora de Matemática Aplicada, Ana María Degano, por haber pedido, a través de una nota enviada a la dirección, un cambio de mesa de examen, va a estar supervisado por el Departamento de Jurídica del Ministerio, que evaluará las pruebas existentes para luego determinar los pasos a seguir. Para el funcionario, "los elementos que se recogieron hasta ahora demuestran que hubo una mala intervención por parte de la escuela en el caso". Por ese motivo, la Delegación Zonal del Mministerio dispuso que una supervisora trabaje en la centenaria escuela de Entre Ríos y Mendoza para tratar de esclarecer un caso polémico e inédito dentro del ámbito educativo.

La mediatización del caso provocó la intervención del Ministerio de Educación provincial ante la intransigencia de la docente, que el pasado martes, en la audiencia de conciliación realizada ante el juez Héctor Nuñez Cortelle, en el Juzgado Correccional 9, insistió en continuar con las demandas contra el ex alumno del Normal 1.

Sin querer adelantarse a lo que pueda ocurrir en la investigación, Cancela indicó que "la gama de medidas que se pueden tomar van desde un apercibimiento hasta un desplazamiento del cargo a través de un sumario. De todas maneras, no se puede actuar arbitrariamente, y por eso se va a determinar jurídicamente".

El delegado zonal del ministerio de Educación de la provincia hizo declaraciones en consonancia con las realizadas el pasado lunes por la ministra de la cartera educativa, Adriana Cantero, quien lamentó la situación que se originó en el Normal 1, apuntando directamente a los directivos del establecimiento.

"Esto merece una reflexión de parte del personal directivo que permitió que esto llegara al nivel judicial. El alumno se dirige a la rectora y lo que hace ella es darle esa nota a la profesora. Si en su contenido había término agraviantes, se tendría que haber tratado con los alumnos y padres", indicó Cancela.

El funcionario expresó que "hasta ahora los elementos que se recogieron demuestran que hubo una mala intervención por parte de la escuela en el caso del alumno y la profesora. Y es responsabilidad de los adultos y trabajadores de la educación ponernos por sobre las cuestiones que nos puedan resultar ofensivas, no como una cuestión personal, ya que estamos hablando de personas que están aún en formación".

La polémica profesora Degano le inició una causa penal por injurias y otra civil, donde pide un resarcimiento económico de 5 mil pesos, al alumno Juan Pablo Calandria, quien tras rendir tres veces mal, le entregó una carta a la rectora del Normal 1, María Carrillo, solicitando que la docente no estuviera en la mesa de examen por considerar que lo discriminaba.

Lo insólito del caso fue que la profesora, después de enviarla la carta documento al alumno, le tomó la prueba dos veces más. Finalmente, el chico pudo aprobar la materia cuando pidió la intervención del ministerio de Educación. Degano, después de su paso por los Tribunales provinciales, continúa dictando sus clases de matemática aplicada en el Normal 1.