"Me voy porque cumplí un ciclo: tengo otras cosas que hacer y creo que puede venir gente capaz de suplantarme. Me voy agradecido a todo lo que me permitió hacer el cargo, la gente que me ayudó y todo lo que pude conocer. Quiero resaltar el agradecimiento que Rosario les debe a los Estevez: este es un caso excepcional. Destaco además que esto ya ha recibido el impacto del tiempo y hay que mantenerlo, hacer su conservación preventiva; esto es algo de lo que la Municipalidad de Rosario tiene que tener debida conciencia. Me voy contento de que el cargo se renueve por concurso. La secretaria de Cultura, María de los Angeles (Chiqui) González, me dijo: 'Vos tenés que irte con un concurso de oposición y antecedentes, como cuando entraste'. Y yo le respondí: 'Por proponer esto, vas a quedar en la historia de la museología rosarina, porque los cargos de director de museo deben concursarse'."

Un hecho especialmente digno de recordarse en la gestión de Pedro Sinópoli al frente del Museo Estevez fue la recuperación del retrato de Doña Teresa Ruiz Apodaca de Sesma, obra de Francisco de Goya. "Cargado ahora del aura que le ha otorgado el ultraje que significó su robo y desaparición durante 13 años, más allá de su particular belleza, se podría decir que esta es la obra más destacada", dijo.