Les escribo desde el trabajo (operadora de callcenter...)

Wow, acá estoy medi@ escondid@ en mi box, intentando que no se me piante un lagrimón, con la carta q mandó Roberto Piazza. Wow

Soy... siempre lo fui.. siempre lo pensé... siempre lo dudé... hasta que hace ya casi 4 años “me salí del closet”... 4 años en los que recibí más golpes que otra cosa (literalmente, un primero de enero, volviendo a casa con mi ex pareja, un hombre, borracho, se nos empezó a tirar encima, no me callé la boca, digamos que lo mandé a freír churros, y al dar un paso hacia adelante para insultarlo un poco más, me encajó flor de piña, por ser, nada más que por ser, y por caminar de la mano con otra mujer) ...también me fui de mi casa... peleada con mi papá y siendo tan terca como él... me rehusé a volver ... sólo reaparecí en los 2 últimos meses agónicos de mi papa ... nunca escuché su “perdón” de boca de él, sí llegó a decirme que no le importaba lo que fuera mientras me recibiera... mi mamá no me habla del tema... es que le importa tanto el qué dirán...

Mis amig@s... l@s más cercan@s y más antigu@s... lo saben... pero me cuesta horrores decírselo a la gente nueva q se va apareciendo en mi vida...

Después de perder a mi papá... volví a estar en mis cabales... digamos que la primera mujer con la que estuve no fue una buena influencia... ahora me siento salvada por mi actual pareja, a quien yo “contagié” las ganas de amar a otra mujer ... cuya familia obviamente (¿por qué tengo que decir obviamente?) no está saltando en una pata pero ha tenido una reacción completamente diferente... de vez en cuando almuerzo con ellos y la próxima semana voy a estar empezando el año con ellos (mi mamá todavía no lo sabe ... ay cuando se entere)

En el medio de esto que escribo tuve que pararme al baño, porque no fue sólo un lagrimón el que cayó... digamos que la vida se me complicó bastante... desde que soy, por lo menos al principio...como cualquier persona me arrepiento de muchas cosas que hice durante estos últimos años... pero más allá de esos errores... me siento orgullosa de ser quien soy hoy, lo que soy hoy. Es increíble la tranquilidad que tengo, al estar haciendo lo que siempre pensé (más allá de las situaciones incómodas con la gente q no lo sabe...)

Decir que me encantó la carta de Roberto está mal... en realidad no me encantó... porque no me puede encantar que tod@s nosotr@s tengamos que vivir todas esas situaciones... me repugna completamente, que tengamos que vivir apartados de “lo normal”, pensando todo el tiempo en cuándo si y cuándo no.

Soy solo un@ de tantas historias.

Besos y abrazos para tod@s!!!

Florencia Macario