Esa arraigada percepción de que protección y erotismo nunca se revolcarán en la misma cama aparece bien desmentida en esta original campaña de Stop Sida donde todos los modelos son trabajadores sexuales en actividad... En un mismo mensaje, unos cuantos guapísimos chicos se venden a sí mismos, mientras como parte de la oferta incluyen su apego a los condones, los guantes de latex, el gel, según el caso. Así es que en el reverso de una de estas postales David recomienda que “si te gusta el fist fucking (meter el puño) ten en cuenta que se pueden causar lesiones anales. Aumenta el riesgo de transmisión de VIH y otras ITS si después follas a pelo. Es importante usar guantes de latex y mucho lubricante hidrosoluble o a base de silicona, ningún otro tipo de lubricante. No uses cremas analgésicas, podrías hacer que no sientas que te están produciendo lesiones graves”.

En otra postal, Angel, que se presenta como hombre que se traviste para complacer a sus clientes, enumera una serie de máximas que, si bien no son las de Merceditas, tienen su utilidad: “Para un buen servicio sexual es importante que digas las cosas que te gustan o te dan más morbo, los trabajadores sexuales no podemos adivinar. Hay muchas cosas que podemos hacer y que son seguras respecto del VIH: besarnos, acariciarnos, masturbarnos... Follar no es sólo penetración anal”.

El respeto hacia los trabajadores sexuales, el respeto hacia el deseo de los clientes, el respeto por la vida de todxs aparecen aquí como fórmulas rituales de un Marqués de Sade del siglo XXI. Para ver los videos: www.stopsida.org/SIATSl