Los meses del verano son sin duda los más propicios para emprender la aventura de un trekking por los alrededores de El Calafate y el Parque Nacional Los Glaciares. Uno de estos recorridos llega hasta el Cerro Cristal, donde desde sus senderos se pueden contemplar los glaciares Perito Moreno, Grande, Frías, Gorra e incluso las Torres del Paine chilenas, siempre desde lo alto (1282 metros). La caminata lleva cuatro horas para subir y tres para bajar.

A orillas del lago Roca, el esplendor veraniego del Parque Nacional Los Glaciares.

Una alternativa más audaz es la caminata por el brazo sur del lago Argentino, que lleva un mínimo de tres días. Una huella marcada permite hacer el trayecto sin guía pero hay que solicitar antes autorización a los guardaparques. El atractivo principal es caminar un trecho sobre el glaciar Grande y pernoctar en un refugio de montaña con tarimas para ocho personas con bolsas de dormir. Esta caminata es una de las mejores aproximaciones que se pueden hacer a la esencia de este inabarcable parque nacional.

Para gente más tranquila, existen opciones de trekking con una duración de sólo una o dos horas, como la excursión a una cueva con pinturas rupestres. Y si los turistas se entusiasman con recorrer la vera del río Cachorro, tienen que tener en cuenta que requiere cinco horas de caminata.

Dormir frente al lago

En el área del lago Roca, a 60 kilómetros del glaciar Perito Moreno, existe una posibilidad económica de alojamiento para realizar trekkings y excursiones desde allí. Es un confortable camping que, además de sus 37 parcelas para carpas, dispone de dormis para dos y cuatro personas en medio de un bosque.

Una pequeña carpa frente al gran paisaje de la región andina de Santa Cruz.

Un dormi es un cuarto pequeño con calefacción y sin baño. Además de ser una opción por lo agreste, su ubicación ofrece un panorama que no tiene precio: la belleza del paisaje con vista al lago Roca, uno de los más hermosos de todo el parque, rodeado de montañas. Muchos de sus huéspedes son viajeros que llegan por la Ruta 40 desde Esquel y hacen escala aquí para continuar viaje a Ushuaia. El camping les sirve de base para hacer las excursiones que parten desde El Calafate. También aficionados a la observación de avifauna eligen este lugar para sus salidas fotográficas. Entre las aves, es frecuente encontrar pájaros carpinteros (en sus variedades de chiquito y pico largo), la bandurria, cisnes de cuello negro y flamencos. Entre los mamíferos existe la posibilidad de avistar zorros, guanacos y con suerte algún puma.

Un atractivo fundamental del lago Roca es la pesca de truchas arco iris y steelhead (o canadienses), y en menor medida una especie autóctona llamada perca. El límite de pesca es de dos truchas canadienses y una arco iris (el resto se tiene que devolver). Y según los encargados del camping, “todo pescador tiene garantizada en el lago Roca al menos la trucha para la parrilla”.

El camping dispone de un restaurante, proveeduría, baños con duchas de agua caliente, parrillas, mesitas en cada parcela para carpa –separadas entre sí por treinta metros–, alquiler de caballos, bicicletas, equipos de pesca, juegos para niños, mesas de ping pong y de pool.