turismo

Domingo, 6 de julio de 2008

El Robin Hood correntino

La historia de Antonio Mamerto Gil Núñez –matizada por la tradición oral– dice que este gaucho desertó del Ejército Argentino a mediados del siglo XIX para convertirse en un bandido rural que les robaba ganado a los estancieros ricos y les daba una parte del botín a los pobres. Lo atraparon el 8 de enero de 1878 y lo ajusticiaron colgado de los tobillos en un algarrobo que aún sobrevive junto a la tumba. Cuenta la leyenda que antes de morir le advirtió al sargento que lo iba a degollar que, si no lo enterraba, al llegar a su casa encontraría a su hijo moribundo. El verdugo desoyó las últimas palabras del Gauchito Gil y dejó su cuerpo colgado a la intemperie. Pero la maldición se había cumplido. Al volver a su casa y comprobar que su hijo se moría, el sargento regresó al lugar del degüello y dio sepultura al ajusticiado. Fue así que el Gauchito descansó en paz y el hijo del sargento se sanó. Según lo certifican las incontables chapitas de agradecimiento clavadas en el histórico algarrobo, parece que el Gaucho Gil sigue haciendo milagros y por millares.

Compartir: 

Twitter

SUBNOTAS
 
TURISMO
 indice
  • Nota de tapa> VACACIONES DE INVIERNO > Misiones, Corrientes y Entre Ríos
    Rutas de la Mesopotamia
    De Entre Ríos a Misiones, un viaje de dos semanas por las termas, esteros y selvas de la...
    Por Julián Varsavsky
  • VACACIONES DE INVIERNO I > POR LOS CERROS DEL NOROESTE
    Tres perlas salteñas
    Por Pablo Donadio
  • RIO NEGRO > AL PIE DEL CERRO PILTRIQUITRóN
    El Bolsón en invierno
    Por Mariana Lafont
  • HUNGRIA > LA CIUDAD DE BUDAPEST
    Burguesa y señorial
    Por Maribel Herruzo
  • Noticiero

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.