El rioplatense –especialmente el uruguayo– es uno de los carnavales más sofisticados y complejos del continente. En Montevideo la fiesta se desarrolla por todo febrero hasta mediados de marzo, durante 40 días. Por un lado están las presentaciones de las murgas, cuyos tablados al aire libre están por todo Montevideo. Sus directores son poco menos famosos que las estrellas de rock, pero las murgas tienen un canto grupal al ritmo del bombo, el platillo y el redoblante. El momento culminante del Carnaval es el desfile de llamadas, que son unas 50 agrupaciones que recorren las callejuelas del Barrio Sur de la ciudad al ritmo de los tamboriles y su candombe. Desfilan dos noches seguidas con unos 150 integrantes cada una, la mayoría negros y mulatos o también lubolos, que son blancos tiznados para la ocasión.