A caballo por los esteros
Una cabalgata por los alrededores de los esteros ofrece varias facetas. Por un lado, es una buena oportunidad de recorrer las casas de adobe –sin luz ni agua– desperdigadas en las afueras de Colonia Pellegrini, donde el mismo tendal para la ropa, a veces sirve para colgar la carne salada a secarse al sol. El guía es un paisano correntino que cuando se cruza con otros hombres a caballo, intercambia con ellos unas palabras en guaraní. Un fortísimo ulular que proviene de un árbol atrae nuestra atención, y aunque parezca una alarma es en realidad el canto de millares de cigarras. A medida que nos adentramos en las zonas anegadas proliferan las palmeras yatay y aparecen los teros, los chajás e infinidad de cotorritas. Una cigüeña yabirú, de un metro veinte de altura, comienza a corretear cuando nos divisa y al rato levanta vuelo. Otra ave llamativa es un muy gran patollamado picasso, de color negro con pintas blancas. La cabalgata dura unas 3 horas y cuesta $ 25.