La fiesta de Nosso Senhor dos Navegantes empieza en la víspera, hasta se puede decir que empieza el año anterior, pues siendo una fiesta del 1º de enero, día del Año Nuevo, comienza en la tarde del 31 de diciembre, cuando la imagen del Bom Jesus es traída de su hermosa Igreja da Boa Viagem, donde los azulejos cuentan sus milagros y apariciones, salvando a náufragos y barcos, hacia la Igreja da Conceiçao da Praia, en la cual la Virgen, su Madre, lo espera. Uno y otra, el Senhor dos Navegantes y la Senhora da Praia, son trasposiciones católicas del mito de Yemanjá, señora de las aguas. Por el tranquilo mar del golfo, en medio de un cortejo de saverios, de barcas y barcazas, canoas, pequeños yates repletos de gente, rumbea el santo hacia el Cais Cairu, frente al Mercado Modelo, para la visita familiar, para regresar al día siguiente. En el ciclo de las fiestas populares de Bahía, todas ellas nacidas de nuestra democraciaracial, la procesión del Senhor dos Navegantes es la de mayor densidad católica. En la ciudad de Salvador da Bahia de Todos os Santos, los colores, las cosas, los sentimientos, los ritos, los dioses están mezclados, nuestra verdad es la mezcla de razas, de culturas, de creencias, de ritmos, de alegrías y dolores, de luchas de esclavos malés, géges, nagós, congos y angolas, para crear la nación brasileña, original y única, civilización y cultura mestizas, la luminosa cara de nuestro pueblo. En el navío del Senhor dos Navegantes también viaja Yemanjá.
* Bahía de todos los santos. Editorial Losada. 8ª Edición (1996)