Además de recorrer los circuitos Inferior y Superior de las pasarelas dentro del parque (incluidos en la entrada), la excursión más vertiginosa que se realiza en el lado argentino es la llamada Aventura Náutica, que consiste en meterse de lleno en los saltos navegando en un poderoso gomón semirrígido con motor fuera de borda. Todo comienza avanzando por los rápidos río arriba entre dos paredes selváticas al estilo Apocalipsis Now hasta que de repente se desata un verdadero cataclismo de aguas espumantes que bullen como el aceite y un atronador torbellino indica el epicentro de un cataclismo. A metros de la embarcación, una catarata suicida se estrella contra sí misma en el salto San Martín, produciendo ráfagas de rocío que se expanden hacia arriba por todo el ambiente. Estamos inmersos en una densa nube de agua, mientras la vibración de la catarata nos retumba hasta en las entrañas.

La Aventura Náutica tiene su contrapartida, que es una silenciosa navegación en una balsa inflable en la parte superior del río Iguazú –antes de que caiga en los saltos–, donde todo es tranquilidad absoluta y se avanza a remo por las aguas casi inmóviles observando la fauna del parque. Si se realiza esta flotada al atardecer, seguramente aparecerá algún tucán volviendo a su nido. Y el guía, con vista de lince, encontrará algún yacaré al acecho asomando sus ojos por encima del agua.

Aquellas personas con inquietudes por conocer más a fondo la selva pueden optar por una excursión en 4x4 que se interna por uno de sus sectores más vírgenes. Según sus organizadores, “no es un paseo para todo el mundo, sino para quienes tengan una mirada ecológica”. Además se realizan solamente dos excursiones por día. El jeep avanza por un estrecho sendero de tierra roja bajo una galería vegetal donde aparecen grupos de monos, y a lo largo del camino se van haciendo paradas en las que el guía muestra las diferentes especies vegetales y ayuda a interpretar la compleja trama de interrelaciones entre las especies vegetales y animales, que hacen de la selva un gran cuerpo viviente.