Para quedar libre Porretti tuvo que pagar 40 mil pesos de fianza que le fijó la Cámara, que duplicó el monto de la caución que le había impuesto el juez de primera instancia como garantía para no fugarse.

En el fallo, uno de los camaristas hizo hincapié en "la excepcional situación de que Porretti ejerce un cargo de elección del pueblo" y por ello recomendó a la Justicia "ser prudente (...) sin dejar de aplicar la ley" a la hora de resolver actos que "directa o indirectamente puedan interceptar" la soberanía del pueblo que lo consagró como jefe municipal, señalaron fuentes judiciales.

Apenas fue liberado, Porretti partió rumbo hacia Pinamar donde vive su familia y desde allí volverá a dar batalla para recuperar el mando de la intendencia tras la suspensión que dispuso el Concejo Deliberante cuando estaba al mando del hoy jefe comunal Rafael De Vito.

Precisamente, ahora la defensa de Porretti no sólo trabajará para revertir las pruebas por la extorsión sino que espera que la Suprema Corte de Justicia bonaerense resuelva el planteo que ya analiza para devolverle el cargo de intendente.

Pero en la causa en sí por el delito de extorsión la Fiscalía de Dolores también apelará ante el Tribunal de Casación bonaerense el fallo que dispuso la excarcelación extraordinaria, con vistas a conseguir que Porretti quede tras las rejas mientras se sustancia el proceso.

La Cámara además rechazó el pedido de la defensa del ex secretario de Gobierno Aldo Leonián para quedar en libertad, y por lo tanto permanecerá preso pero en su casa, en el marco del arresto domiciliario que se le concedió.

A Porretti y Leonián los acusaron de haber extorsionado a los empresarios Rubén Cameroni y Javier Porjolovsky, propietarios del complejo bailable Ku-El Alma: los denunciantes presentaron en febrero pasado un video y aseguraron que se les exigió que pagaran 400 mil pesos para evitar que la clausura del boliche.

El 11 de febrero la fiscal María Fernanda Haschmann pidió dos detenciones por esta causa: Leonián fue arrestado, pero Porretti logró evitarlo con un recurso de eximición de prisión que quedó en pie hasta fines de marzo, cuando la Cámara de Dolores lo rechazó.

Finalmente, el 3 de abril pasado, el juez Gastón Giles ordenó su detención y, tras ocho horas de intensa búsqueda, Porretti quedó preso en la comisaría de General Belgrano.

Apenas 24 horas después consiguió que el mismo juez le otorgara la excarcelación extraordinaria, pero no se concretó porque la fiscal Haschmann se opuso porque el delito no era excarcelable y porque "en modo alguno (el intendente) se ha sometido a derecho voluntariamente".

Además, la fiscal se había quejado de la fianza impuesta en primera instancia, que ahora se duplicó: "No deja de asombrar -además- lo irrisorio del monto de la caución real estipulada cuando en autos se ha acreditado que los montos percibidos fueron 90 mil pesos", dijo entonces.

Ahora, sin embargo, la excarcelación quedó firme por orden de la Cámara de Dolores.

En los argumentos, el juez Fernando Sotelo consideró que "el artículo 21 de la Constitución provincial dice que podrá ser excarcelada o eximida de prisión la persona que diere caución o fianza suficiente". Y reseñó que "la ley determinará las condiciones y efectos de la fianza atendiendo a la naturaleza del delito, su gravedad, peligrosidad de la gente, y demás circunstancias y la forma y oportunidad de acordar la libertad provisional".

El camarista Jorge Luis Dupuy tuvo otro fundamento, al resaltar "la excepcional situación de que Porretti ejerce un cargo de elección del pueblo, frente a cuya soberanía debe la Justicia -sin dejar de aplicar la ley- ser prudente en los actos que directa o indirectamente puedan interceptar tal voluntad general o eventualmente interferir con otras competencias respecto de ello".

"Ya recuperó la libertad", celebró esta tarde el abogado defensor Roberto Babington, quien deslizó que el dinero para pagar la fianza se lo prestaron.

Su colega José Ochoa aseguró que, con esta decisión, no se puede asegurar que Porretti estuviera "contento" y subrayó que "nunca se lo debió haber detenido".

También volvió a cuestionar el video que registró con una cámara oculta la reunión entre Porretti, Leonián y los denunciantes: señaló que aún está siendo analizado por la Gendarmería Nacional, y evitó una y otra vez explicar públicamente qué hacía el intendente en esa reunión en la que supuestamente se hablaba de la coima.

Porretti, en tanto, evitó el contacto con la prensa: desde la comisaría de General Belgrano donde estuvo 26 días fue llevado el juzgado de Dolores, donde quedó formalmente en libertad. Y luego, en un auto BMW, partió rumbo al Nuevo Golf Country Club, donde lo esperaba su familia.