Los datos corresponden al Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) que difunde todos los meses el INDEC a modo de adelanto de la evolución del PBI que se difunde trimestralmente.

De esta forma la economía hilvanó 64 meses consecutivos de crecimiento desde diciembre de 2002.

La lectura de las cifras ofrece distintos puntos de evaluación y en primer lugar contradice evaluaciones privadas que sospechaban una caída contra febrero por efecto del paro agropecuario.

De esta forma el crecimiento de la economía habría estado sustentado a partir del consumo interno y la industria, dado que las exportaciones también debieran haberse resentido por la medida de fuerza.

Por otro lado, cabe inferir que en caso que la actividad hubiese sido plena la economía podría haber crecido por encima del 10 por ciento.

Desde otro punto de vista el crecimiento interanual de marzo (8,1 por ciento) es el más bajo desde abril del año pasado cuando había sido de 8 por ciento.

A su vez marca una desaceleración con relación a los primeros dos del año ya que en enero la expansión de la economía había sido de 10 por ciento y en febrero de 8,7 por ciento.

En tanto, el aumento de 1,2 por ciento de marzo contra febrero fue el más alto desde agosto del año pasado (1,6 por ciento).

Curiosamente marzo de 2008 tuvo la misma cantidad de días hábiles que febrero -21- ya que el segundo mes del año fue bisiesto y en el tercer mes se celebró Semana Santa y el Día de la Memoria.

Cuando se analiza el trimestre también se observa una desaceleración en el ritmo de crecimiento acumulado. En enero fue de 10 por ciento, en el primer bimestre de 9,3 por ciento y en el trimestre de 8,8 por ciento.

De acuerdo con las cifras oficiales del INDEC el actual nivel de la economía es un 85 por ciento superior al que se registró en el piso de la crisis en enero de 2002.