El asalto fue cometido en la casa situada en Cerrito 2524, de Lomas del Mirador, en el oeste del conurbano, donde vive un comerciante de nombre Gustavo, de 40 años; su esposa y sus dos hijos, de 4 y 12 años, el último de los cuales se había quedado a dormir en lo de su abuela.

Cinco delincuentes armados ingresaron a la vivienda por una puerta del balcón del primer piso y amenazaron a la pareja para que les entregara 2.000 pesos que el dueño de casa había retirado horas antes de un banco para pagar el festejo del cumpleaños de su hijo, que realizaría ese mismo día. El hecho, que fue dado a conocer hoy, fue cometido el pasado sábado a la 1.30.

Según relató esta mañana a la prensa la propia víctima, Gustavo, el asalto se produjo cuando él y su familia dormían y los delincuentes entraron a la casa por una ventana que habían dejado abierta.

"Se treparon por la reja, se metieron al balcón y cuando mi mujer escuchó un ruido y salimos para ver qué era, ya teníamos a uno de los cinco adentro. Lo primero que hicieron fue pegarme un culatazo en la cabeza, me tiraron al piso, nos ataron a mi mujer y a mí y nos pedían la plata", contó el hombre en la puerta de su casa.

Según recordó Gustavo, uno de los asaltantes fue el que se mostró más violento y continuamente lo atacaba. "Había uno que se despachó conmigo toda la bronca, pasaba y por las dudas me pegaba. Yo ya estaba en el piso boca abajo, me habían abierto la cabeza y éste me saltaba en la espalda", dijo.

El comerciante recordó que los ladrones le exigían continuamente el dinero. "A mi mujer le cortajearon el pelo y mientras le decían que si no les decía dónde estaba la plata se iba a quedar pelada. Nos amenazaban con que iban a secuestrar al nene y que íbamos tener que pagar rescate y a mi me gatillaron

cinco veces en la cabeza". "Mi mujer estaba atada arriba de la cama y pudo espiar cuando vaciaron el tambor del arma, me empezaron a gatillar en la cabeza

y me decían 'en el próximo sale la bala, decí dónde esta la plata", agrego Gustavo.

El comerciante dijo que los delincuentes recorrieron toda su casa "con tranquilidad" y que hasta se sirvieron yogurt, champagne y gaseosas de la heladera. También contó que la impunidad con la que actuaron fue tal que

se llevaron un DVD de una de las habitaciones y regresaron luego para preguntarle cuál era el control remoto. "Yo hace dos días que recién me animé a volver a mi casa. Me comuniqué con la comisaría les pedí que pasaran por acá cada tanto e hicieran sonar la sirena para estar tranquilo, pero todavía los

estoy esperando", cuestionó la víctima. Finalmente, Gustavo dijo que por suerte su hijito dormía profundamente y no llegó a enterarse de que los delincuentes

estuvieron casi una hora en la casa y manifestó que también afortunadamente no tocaron nada de la comida y souvenirs que habían preparado para festejar ese día el cumpleaños del niño.

"Lo que más bronca te da es que les tenés que decir gracias porque no te hicieron nada", expresó el comerciante, quien dijo que los delincuentes tenían entre 20 y 25 años y se movilizaban a pie. Fuentes policiales informaron que la banda robó de la casa diversos objetos que cargó en bolsos y unos 2.000 pesos que el hombre había retirado del banco.