"Les pedimos que fueran al diálogo, pero son ellos (los dirigentes rurales) quienes deben decidir si están dadas o no las condiciones", dijo Eduardo Serantes, presidente de la Comisión Justicia y Paz, organismo que asesora el obispo Jorge Casaretto.

El titular de la Federación Agraria Argentina (FAA), Eduardo Buzzi, anticipó que "evaluaremos en la Mesa de Enlace si vamos o no vamos", pero advirtió que "no nos gusta que nos lleven a los empujones a lugares donde no sabemos ni siquiera qué vamos a conversar".

En tanto, el titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Mario Llambías, afirmó que "monseñor Casaretto sabe que no podemos ir porque sí al diálogo; necesitamos un temario previamente acordado", al manifestarse "un poquito más escéptico que Buzzi" respecto del posible diálogo con el Gobierno.

"Es muy difícil ir a cualquier diálogo cuando no hay reglas claras propuestas. Nuestra vocación siempre fue buscar soluciones. Ojalá que no sea una maniobra para distraer a la sociedad", opinó Llambías.

Hugo Biolcati, titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA), afirmó por su parte que "espera estar equivocado" en lo que respecta a la desconfianza al llamado del Gobierno y que "ojalá se vea un verdadero cambio en la política".

En el marco de la reunión en la sede del Episcopado, la dirigencia agropecuaria y la Iglesia coincidieron en la necesidad de avanzar en soluciones concretas al problema de la pobreza, estimada hace una semana en "cerca del 40 por ciento" por Casaretto, presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social.

Serantes explicó que se trató de una reunión "habitual y programada" del Foro "De Habitantes a Ciudadanos", que auspicia la Iglesia y trabaja sobre un documento referido a "inclusión laboral rural".

"En el encuentro se analizó la situación de la pobreza del interior del país, especialmente de los sectores rurales como indígenas o minifundistas", precisó el referente laico.

El Foro Nacional "De Habitantes a Ciudadanos" es un espacio de diálogo integrado por organizaciones de distintos sectores que busca promover el consenso para la promoción de políticas públicas que garanticen "la inclusión social de todos los argentinos".

Según se explicó, en este contexto, el sector agropecuario elabora, junto con la Comisión Nacional de Justicia y Paz, propuestas en torno al problema de la pobreza en el sector rural y a las problemáticas de los minifundistas, "compartiendo" también las preocupaciones del sector en el contexto social.

El trabajo sobre los "más necesitados del sector rural" refiere, pudo saber esta agencia, a cuestiones tales como seguridad alimentaria, educación rural, tierra, financiamiento, líneas productivas, comercialización, infraestructura y desarrollo territorial, y arraigo y familia rural.

Estuvieron presentes en la reunión, además de Casaretto y Serantes, el obispo Oscar Sarlinga y Carlos Antonietti, de la Comisión Episcopal de Pastoral Social; y el obispo Joaquín Sucunza, de Justicia y Paz.

En tanto, por la dirigencia rural participaron Carlos Garetto (CONINAGRO), Llambías (CRA), Buzzi y Pablo Orsolini (Federación Agraria), Biolcati y Daniel Pellegrina (SRA).