Entre los lugares allanados está la casa del barrabrava de Boca Juniors "El Uruguayo" Richard Laluz Fernández; la de un conocido suyo, apodado "El Zurdo", y la del empresario Martín Magallanes, quien fue socio de Sebastián Forza, una de las víctimas del triple crimen de General Rodríguez.

Los procedimientos, realizados por la Gendarmería y la policía bonaerense, eran supervisados por el fiscal de Martínez Diego Grau, quien tiene la sospecha de que barrabravas de Boca Juniors y un empresario fueron quienes dieron apoyo logístico para matar a Jorge Quintero Gartner y Héctor Luque Ceballos, el 24 de julio del año pasado.

En un domicilio situado en Santo Domingo 2938, de Barracas, la policía apresó a Jorge Moreyra, apodado "El Zurdo", a quien se vincula a "El Uruguayo" Richard, conocido barrabrava xeneize, quien se encuentra detenido por otra causa.

El fiscal Grau, además, allanó la casa de Richard, en el partido de Avellaneda, donde apresó a su esposa, tras hallar en el lugar una pistola 40, el mismo calibre que las empleadas para matar a los colombianos en el estacionamiento del shopping.

En tanto, en otro de los once procedimientos llevados a cabo -tres en el conurbano y ocho en Capital- hubo un tercer hombre detenido y se secuestraron otras pistolas calibre 9 milímetros y 45.

Los voceros policiales afirmaron que también se allanó el domicilio particular del empresario Magallanes, en un country del partido de Escobar, y su empresa Unifarma, situada en Juan B. Justo 6186, de Villa Santa Rita.

Ese empresario fue socio de Forza, asesinado en octubre pasado en General Rodríguez junto con Leopoldo Bina y Damián Ferrón, y de Ariél Vilán, quien se suicidó poco después de esa masacre.

El doble crimen de los colombianos Duque Ceballos y Quintero Gartner fue cometido el 24 de julio del año pasado en el sector G-2 del playón de estacionamiento del Unicenter Shopping de Martínez, donde se escucharon varios balazos que generaron el pánico entre los clientes del centro comercial.

Las pericias determinaron que dos fueron los tiradores que se aproximaron al auto de las víctimas y abrieron fuego con dos pistolas calibre 40.

Quintero Gartner murió en el estacionamiento, Duque Ceballos fue trasladado al hospital de San Isidro donde murió horas después, y Julián Andrés Jiménez Jaramillo fue el único de los colombianos que alcanzó a refugiarse en el shopping y resultó ileso.

Desde el principio, el crimen fue investigado con un móvil mafioso vinculado al narcotráfico, ya que Duque Ceballos, alias "Monoteto", tenía antecedentes por drogas en su país.