"Tenemos la segunda tasa más baja en América Latina de delitos dolosos después de Chile", subrayó Alak, quien entendió que, de esta forma, "los números le otorgan a Argentina una situación privilegiada en América Latina", más allá de la percepción de "una sensación de inseguridad importante más allá de las estadísticas".

"Pese a que las estadísticas son buenas para Argentina, se trabaja irresponsablemente para aumentar la sensación de inseguridad. En ese marco, el tema de la seguridad se usa para lograr raiting y de utiliza también de forma indigna como elemento electoral", advirtió Alak.

Así lo hizo al participar de la inauguración del Seminario "Gestión de Políticas de Seguridad Pública. La seguridad desde una perspectiva integral y local", junto Julio Pereyra, intendente de Florencio Varela y titular de la Federación Argentina de Municipios (FAM), organizadora del evento.

En este marco, Alak afirmó que si bien "se hizo mucho en materia de seguridad, todavía falta mucho por hacer", y remarcó que "la mejor política, la más importante que se puede dar en materia de seguridad, es la inclusión social".

Además, consideró que "una de las maneras en las que no hay que trabajar" para abordar esta problemática "es a partir de la crispación" y sostuvo que las definiciones que son tomadas en esos contextos "son siempre regresiones al pasado que no mejoran la situación".

En este contexto, destacó "el Plan Nacional de Seguridad que se va a lanzar próximamente" y explicó que, en un primer paso para la definición de este plan, se dará a conocer "un índice de siete puntos", de los cuales adelantó algunas cifras.

En este sentido, aseguró que "la sensación de inseguridad a nivel de las grandes ciudades es del 39 por ciento" y que "a escala nacional ese porcentaje baja al 20 por ciento", lo cual muestra que se trata "centralmente de un problema de las grandes ciudades".

De todas maneras, remarcó que esa "sensación de inseguridad no se comparece con las cifras del delito" que, "según datos de las Naciones Unidas sobre Argentina", en lo que hace a delitos dolosos, "la tasa en el país es de 5.3 cada 100 mil habitantes, mientras que el promedio de América Latina es de 25 cada 100 mil habitantes".

En este punto, precisó que "tan sólo el 25 por ciento del total de homicidios dolosos ocurre durante la comisión de delitos, mientras que el 75 por ciento se inscribe en conflictos interpersonales", por lo cual abogó por "potenciar el programa de desarme civil", que ya lleva recolectadas y destruidas 104.782 armas, según detalló.

En otro orden, el ministro aseguró que, en el marco del Plan Nacional de Seguridad, será creado un "Instituto Nacional de Seguridad", que será "un centro permanente de formación y de capacitación" que buscará "forjar una gran legión de civiles preocupados por la seguridad".

En tanto, en declaraciones a la prensa formuladas tras su participación en el seminario, Alak postuló que, para abordar el tema de la seguridad, el camino "no es ni la mano dura ni la mano blanda, sino cabezas inteligentes que trabajen seriamente", como así también "la lucha contra la desigualdad económica", un factor que consideró "central" en la inseguridad.

Por su parte, al abrir el encuentro que se desarrolla hoy y mañana en el Salón Auditorio del Banco Nación, el titular de la FAM que la política de seguridad "no pasa por más hombres, más patrulleros o la baja en la edad de imputabilidad sino que debe tener la visión de una política de Estado".

En este sentido, Pereyra señaló que "en muchos casos la articulación" entre los distintos estamentos "es mala" y aseguró que los municipios están "dispuestos a ser articuladores" y a asumir "responsabilidad política" frente al tema de la seguridad, pese a que operativamente no es un área que incumba a las intendencias.

El Seminario "Gestión de Políticas de Seguridad Pública" contará con diferentes mesas de debate durante la jornada de hoy y mañana, mientras que el cierre está pautado para mañana, entre las 12:15 y las 15, con las exposiciones del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, del gobernador Daniel Scioli y del intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra.