Durante la Quinta Conferencia Internacional sobre Felicidad Interna Bruta, que sesionó en Foz de Iguazú, el funcionario expuso la posición de Bután, que está atrayendo la atención de gobernantes y economistas de varios países con su nueva fórmula para el cálculo de la riqueza y el desarrollo.

"Desarrollo es ser feliz, en caso contrario no es desarrollo", afirmó Thinley, quien consideró necesario "articular el bienestar psicológico, el uso del tiempo, la vitalidad de la comunidad, la cultura, la salud, la educación, la diversidad del medio ambiente, el patrón de vida y la gobernanza".

Líder del primer gobierno democráticamente electo en Bután, recordó que el término FIB fue creado en 1972 por el rey Jigme Wangchuck, quien en aquel momento tenía 16 años, "para contraponerse a las mediciones puramente materiales del PIB", es decir, la suma de bienes y servicios producidos en determinado período.

La aplicación del indicador como práctica de gobierno comenzó en Brasil este año, y la psicóloga y antropóloga estadounidense, Susan Andrews, fundadora del Instituto Visión Futuro, coordina el proyecto pionero en la periferia de Itapetininga (San Pablo), en asociación con la intendencia municipal.