En la previa al amistoso que Nigeria y Corea del Norte disputaron en Sudáfrica, cuando falta menos de una semana para el inicio del campeonato del mundo, una multitud comenzó a agolparse frente a las rejas para ingresar al estadio, que tenía su capacidad colmada. La Policía intentó impedirlo, sin lograr que se produjeran amontonamientos y avalanchas.

El hecho sucedió mientras ambas selecciones se encontraban en el campo de juego entonando sus respectivos himnos, sin enterarse de lo que sucedía fuera del estadio.

La promesa de entradas gratuitas fueron el incentivo por el cual un numeroso

grupo de integrantes de una colonia nigeriana cercana al estadio se acercaron para ver a los futbolistas de su país.

Según estimaciones, la cifra de muertos y heridos podría ascender a medida que pasen las horas.

El partido terminó con victoria por 3-1 del conjunto nigeriano, primer rival argentino en el Mundial el sábado en el estadio Ellis Park de Johannesburgo.

El estadio no integra la nómina de los escenarios en los que se disputarán partidos del mundial.