El presidente de Perú, Alan García, y el secretario general del organismo interamericano, José Miguel Insulza, serán los encargados de inaugurar las sesiones plenarias de la XL Asamblea General de la OEA y de presidir la mayoría de los debates que se sucederán en el seno del encuentro., junto con el canciller peruano, José Antonio García Belaúnde.

Aunque las actividades oficiales comenzarán mañana, los cancilleres de los países americanos presenciaron varios actos previos a la inauguración, como los tradicionales diálogos de jefes de delegación con los representantes sindicales, de la sociedad civil y del sector privado, así como un almuerzo con los embajadores de los alrededor de 64 países observadores del organismo.

El asunto principal de la mayoría de los debates de la asamblea será "paz, seguridad y cooperación" entre los países americanos, conceptos abarcan los principales problemas que, según el organismo, sufre la región, como el narcotráfico, el crimen organizado, la seguridad pública y el desarrollo, pero también la defensa y el armamentismo.

La OEA cerró un proyecto de declaración, promovido por Perú, que gira en torno a la preocupación de algunos países miembros ante lo que consideran un "excesivo" armamentismo en la región y una exagerada asignación de recursos al gasto militar que podrían destinarse mejor o en mayor medida al desarrollo.