La jefa de Estado llegó a las 16 hora local (las 5 en la Argentina) a la Universidad de Negocios Internacionales y Economía, para recibir el doctorado como parte de la primera actividad de su visita oficial a la República Popular China. Lo hizo acompañada por el canciller Héctor Timerman, la ministra de Industria, Débora Giorgi, y otros funcionarios que integran la comitiva presidencial.

En su mensaje de bienvenida, el presidente de la universidad, Shi Jianjun, destacó la relación que existe entre Argentina y China. "Argentina es una potencia de mucha importancia agrícola en el mundo, pero además es conocida por sus bellezas naturales, el tango, y el fútbol", dijo el directivo de la institución. Agregó que desde que Cristina se puso al frente del país "la Argentina logró un desarrollo sostenido de la economía con signos sociales concretos de recuperación", en el marco de la crisis global.

Luego, vestida con la toga propia de la ocasión, de color negro con motivos rojos, Cristina recibió de manos del presidente de la universidad el doctorado Honoris Causa, y sostuvo que lo hizo "no como una distinción personal, sino como distinción al pueblo argentino y a la relación entre los dos países". Valoró además que la distinción provenga de una universidad dedicada a la economía "porque es lo que marcará el futuro del desarrollo de los países del mundo".

A continuación, ya sin la toga ceremonial, la Presidenta comenzó su disertación ante los alumnos de la universidad, y dijo que en la Argentina "vivimos décadas en las cuales las políticas de desarrollo monetario estuvieron por encima del desarrollo productivo", lo cual generó "un impacto fuertemente negativo".

Luego, remarcó que "las Naciones Unidas sostienen que primero China y después Argentina fueron los (países) que lograron tomar medidas que generaron crecimiento en medio de la crisis" internacional. Agregó que en ese momento "se tomaron medidas heterodoxas para sostener las fuentes laborales, y teniendo como base la conservación del vínculo laboral con empresas abiertas y a partir de la relación entre trabajadores y empresas".

Por otro lado, Cristina dijo que "creemos conveniente llegar a la reunión del G-20 con un programa concreto de regulación financiera" y también "con la decisión de la desaparición de los paraísos fiscales como base para que no se repita la crisis" financiera global.

Puntualizó "la necesidad de reformular normas que terminen con el doble estándar", referido a que las políticas de los organismos internacionales "difieren si se trata de un país poderoso o si es un país que no posee esa condición". "Es necesario reconocer un nuevo escenario internacional. Es necesario que los países crezcan de manera armoniosa", sostuvo.