Scioli aseguró que la máquina "se desestabilizó al momento de despegar de una pista de tierra y hundió su tren delantero, por lo que dio varios golpes y quedó completamente destrozado". El gobernador informó que Casal, junto con la procuradora general de la Suprema Corte de Justicia, María del Carmen Falbo, viajaban junto a dos pilotos.

"Todos están bien, tienen algunos golpes producto de la sacudida que dio el avión cuando golpeó las hélices contra la tierra. No fue un problema del avión, un biturbo hélice que utiliza con frecuencia la Policía bonaerenese, sino que se desestabilizó por la propia inestabilidad del terreno", aseguró Scioli.

"Casal tiene un fuerte golpe en el hombro izquierdo", precisó el ministro de Salud bonaerense, Alejandro Collia, aunque confirmó que todos los pasajeros "están fuera de peligro".

Scioli precisó que "las pistas de tierra no son ciento por ciento confiables como las de cemento. El piloto es experimentado pero no pudo controlar el avión una vez que se destabilizó". Mariano Castelucci, secretario de gobierno de Mercedes, informó que la máquina "agarró un charco de agua, se desestabilizó y golpeó contra un monte cercano a la pista".