Patti debe asistir al juicio en su contra en la localidad bonaerense de José León Suarez todos los lunes y jueves por orden del Tribunal Oral Federal 1, y si bien se lo autorizó a permanecer fuera de la sala de audiencias, sigue las alternativas desde una ambulancia que lo lleva y lo regresa a la clínica Fleni de Escobar.

Ante el informe de los médicos del centro de rehabilitacion, presentado por sus defensores, el ex camarista de Casación Alfredo Bisordi y Silvio Duarte, los jueces Lucila Larrandart, Horacio Sagretti y María Lucia Cassain dispusieron que sea revisado por peritos del Cuerpo Médico Forense.

Los resultados del estudio serán informados en la audiencia del próximo jueves y los jueces resolverán entonces si eximen a Patti de la obligación de concurrir a las audiencias.

Antes del inicio del juicio en septiembre pasado, los peritos dictaminaron que Patti está en condiciones de asistir al debate, por lo cual el tribunal lo ordenó y desde entonces compareció en una camilla a las primeras audiencias y tras negarse a prestar declaración indagatoria, no bajó más de la ambulancia. El procesado, con prisión preventiva, sufrió un accidente cerebro vascular y desde entonces cumple su arresto en la clínica.

Por otra parte, al reanudarse las audiencias declaró el testigo Jesús Bonet, secuestrado el 27 de marzo de 1976 en Escobar, y llevado a un camión celular que se estacionó en los fondos de la seccional primera de ese partido bonaerense, tras el golpe de Estado del 24 de marzo de 1976.

Bonet afirmó haber estado allí con José Gonçalves, por cuyo asesinato se acusa a Patti directamente, el sobreviviente y también testigo Daniel Lagarone y el aún desaparecido estudiante de 17 años Carlos Souto. Bonet fue otro testigo que complicó la situación de Patti, al ubicarlo en el lugar de los hechos como en audiencias anteriores hizo Lagarone. "Patti me preguntaba si sabía donde estaba y también quería saber si Gonçalves era montonero y Souto del ERP", recordó el sobreviviente.

El ex secuestrado confirmó que, al igual que narraron otros sobrevivientes, en el camión celular Gonçalves estaba torturado y llegó a decir que Patti le repetía que "lo iba a matar".

Patti es juzgado junto al dictador Reynaldo Bignone, al ex general Santiago Omar Riveros y el ex comisario de Escobar Juan Fernando Meneghini por privaciones ilegales de la libertad, secuestros y asesinatos cometidos en Escobar inmediatamente después del golpe de Estado, cuando Patti era allí oficial de calle.