"Le recuerdo a Corea del Norte que el camino hacia la paz todavía está abierto. La puerta al diálogo aún está abierta", señaló Lee en su discurso de Año Nuevo.

"Deben descartarse las armas nucleares y las aventuras militares. El norte debe trabajar hacia la paz y la cooperación no solamente a través de la retórica, sino con hechos", aseveró.

Lee recordó que Seúl reforzó su defensa tras el ataque a la isla Yeonpyeong y advirtió que reaccionará con vigor ante cualquier otra provocación militar.

Mientras tanto, Corea del Norte inició el nuevo año con un llamamiento a mejorar las relaciones con su vecino del sur publicando un artículo que difundieron el sábado todos los diarios del país en el que se señala que "La confrontación entre el norte y el sur debería apaciguarse lo antes posible".