Un grupo de 2000 personas concentradas en la en la Plaza 1 de Mayo de la capital argelina empezó a gritar "Fuera Buteflika" -en referencia al presidente Abdelaziz Buteflika- y algunas de ellas mostraron portadas de periódicos con la noticia de la dimisión del presidente de Egipto, mientras la policía arremetió con palos contra los participantes en esta protesta no autorizada.

También se informó que hay numerosos detenidos, entre ellos políticos de la oposición y no se reportaron heridos. La policía argelina, advertida de la marcha, había bloqueado el acceso a numerosos lugares de la capital poco antes de las manifestaciones masivas convocadas por la oposición en Argel y en la segunda ciudad del país, Orán.

Las autoridades anularon el transporte ferroviario, cerraron numerosas calles y rutas, y estacionaron tanques acorazados y vehículos todoterreno de las fuerzas de seguridad en diversos sectores de la ciudad y, particularmente, en la plaza del 1 de Mayo, informó el diario "El Watan" en su edición online. El dirigente de la Liga de Derechos Humanos Mustafá Buachichi, advirtió, según Europapress, que el Gobierno "ha desplegado un fuerte dispositivo para impedir una marcha pacífica".

En tanto, en Saná, Yemen, unos 2000 manifestantes antigubernamentales trataron de alcanzar la plaza Tahrir (de la Liberación) para celebrar la dimisión ayer viernes del ex presidente egipcio Hosni Mubarak. Sin embargo, unos 5000 partidarios del presidente Ali Abdullah Salih les expulsaron de la zona. La policía intentó evitar en vano la confrontación.

Los manifestantes contrarios al régimen portaban pancartas reclamando la salida de Salih. "¡Tú eres el tercero, oh Ali!", podría leerse en una de ellas.

El partido gubernamental levantó grandes tiendas de campaña en la plaza Tahrir para evitar que los opositores al régimen ocupen el lugar, como ocurrió las pasadas semanas en Egipto. En otros lugares de Yemen, miles de personas salieron a las calles para celebrar la dimisión de Mubarak. El gobierno de Salih, que dirige el país desde hace 32 años, afirmó que respeta "las elecciones del pueblo egipcio".