El hasta ahora ministro de Salud Pública, Daniel Olesker, pasará al frente de Desarrollo Social, en reemplazo de Ana Vignoli, y en lugar de aquél asumirá el actual viceministro, José Venegas. Lo anunció el propio Mujica al cabo de una reunión del gabinete social y de seguridad.

Luego de la primera modificación del gabinete desde que Mujica asumió la Presidencia, el 10 de marzo de 2010, el mandatario adelantó que habrá más cambios entre sus secretarios, pero aclaró que serán anunciados luego de que converse con las personas involucradas.

Mujica defendió la gestión de Vignoli, que pertenece al Partido Comunista, y subrayó que las designaciones "son personales, frente a analistas que interpretaron la decisión como una represalia por el hecho de que esa fuerza se haya negado a votar, la semana pasada en el Senado, el proyecto de ley de asociaciones entre empresas públicas y privadas.

A Vignoli "le ha tocado bailar con la más fea, ha puesto de su parte la mayor entrega y no tenemos reparos; esta es una cuestión de estrategia que estaba trazada de antemano" explicó el mandatario.

"Tenemos que ajustar enormemente el cómo, en qué se gasta, buscando la mayor eficiencia posible del enorme gasto social que el país realiza y que quisiéramos realizar todavía más", enfatizó Mujica, quien recordó que el país logró bajar los índices de pobreza -de 40 por ciento en 2004 a 18 por cietno en 2010- e indigencia -de 4,7 a 1,2 por ciento en el mismo periodo-, pero que quedan desafíos pendientes. "Es necesario abatir el núcleo duro de pobreza e indigencia, aplicando políticas sociales focalizadas, que se unen en el uso eficiente de los recursos", sostuvo.