Después de que Rousseff y el ex presidente Lula disertarán, la mandataria comenzó su discurso, antes de retornar al país, agradeciendo a ambos por "estar presentes en los momentos más difíciles" y calificó a Lula como "amigo personal y de Kirchner".

Desde una de las alas de la flamante embajada, Cristina señaló que "Argentina tenía un edificio en Washington y no en el país vecino y aliado". En ese sentido, resaltó que el proyecto de construir una embajada propia fue impulsado por el ex presidente Kirchner porque "supo que Brasil iba a ser una de las economías más importantes del mundo. Y decía que teníamos que estar integrados y complementados".

"El tamaño de la relación entre Brasil y Argentina, tiene el tamaño de esta embajada", figuró la Presidenta, en referencia a las grandes dimensiones de la sede diplomática y lo relacionó con la "decisión de profundizar la relación" con Brasil, a la que calificó como "inquebrantable e irrevocable". De esa manera, llamó a continuar creciendo con políticas inclusivas porque "cuando más gente incorporemos más nos fortaleceremos como región", aseguró.

Más temprano, luego de una reunión con la presidenta Dilma Rousseff en el Palacio Planalto, Cristina calificó de “muy buena” la relación entre ambos países y consideró que “la clave” de ello está en comprender que "no hay que enfriar la economía, sino recalentar la inversión". Por su parte, Rousseff afirmó que los vínculos con Argentina “tienen bases sólidas, incluso económicas”, además de “una amplitud que no es similar con otro país”.

“Somos una región muy apetecible, y por lo tanto debemos desarrollar una estrategia inteligente y una integración de los recursos humanos, de materias primas, de ciencia y tecnología para blindarla y no perder lo que hemos logrado”, definió la presidenta argentina durante una conferencia de prensa, al finalizar la reunión.

CFK agradeció además el apoyo brasileño a la causa por las Islas Malvinas y llamó a "entender que el crecimiento de Argentina no tiene por qué ser visto como una amenaza por ningún empresario brasilero”, porque la relación con el país vecino es “estratégico y con impacto regional”.

Por su parte, Rousseff, subrayó la importancia de la población sudamericana en el desarrollo económico y sostuvo que "los más de 400 millones de habitantes que fueron marginados y alejados del proceso son la más grande riqueza", de la región. En su criterio, ésta es "una diferencia con otras regiones del mundo, dominadas por el desempleo y por sobre todo por la inmobilidad política para la resolución de los desafíos".

“En nuestras relaciones hay grandes avances que queremos profundizar, la alianza entre nuestros países cuenta con bases sólidas", aseguró la brasileña, quien también destacó la figura del ex presidente Néstor Kirchner al señalar que a él “le debemos, y mucho, la relación fraternal con Argentina”.

Por otra parte, Cristina Kirchner calificó hoy como "muy importante" la reunión que mantuvieron ayer en Perú los presidentes de los países de la UNASUR, y destacó las coincidencias que tuvieron respecto de "los problemas económicos globales y su impacto en la región". "Por primera vez hemos visto con mucha gratificación una mirada común acerca de los actuales problemas globales y cómo están impactando", remarcó.