18:47 › "HACER FRENTE A LOS BANDIDOS ES DEBER DEL ESTADO"
El presidente sirio defendió la acción militar contra los manifestantes opositores y abogó por continuar con la represión a quienes calificó como "bandidos" que se dedican a "aterrorizar a la población". El ejército irrumpió con tanques y tropas de asalto e las ciudades de Deir Al Zor y Homs y mató al menos a otras 66 personas.
Desde temprano, columnas de tanques y excavadoras, cubiertas por un intenso fuego de artillería, ingresaron desde el norte y el oeste en la ciudad de Deir Al Zor, la más grande del noreste del país y convertida hasta ahora en uno de los bastiones de las protestas contra el régimen. Allí, en el barrio de Al Joura, numerosos francotiradores ocuparon las terrazas para disparar contra quien intentara salir a las calles de la ciudad cuyos hospitales fueron cerrados, por lo que debieron instalarse puestos de urgencia en el interior de varias mezquitas, informó la agencia de noticias Europa Press.
Ante el intenso asalto en varios barrios, algunos intentaron instalar barricadas improvisadas, con automóviles, rocas y postes, para impedir el acceso de los vehículos militares por las calles más estrechas, informó la agencia de noticias DPA. Según activistas de la oposición, la feroz embestida mató al menos a 50 personas en Deir Al Zor y otras 16 en la ciudad de Homs, que también sufrió el embate del ejército.
El presidente Assad aseguró ante el ministro de Asuntos Exteriores de Líbano, Adnan Mansour, quien se encuentra de visita en Damasco, que el país "sigue el camino de la reforma", tras rechazar la catarata de críticas llegadas desde la comunidad internacional.
Como ocurre desde el inicio de las protestas -el 15 de marzo pasado- la versión oficial sostiene que la población siria está en calma y respalda a Assad, y que los incidentes estaban causados por "bandas armadas" que "asesinaron a 500 soldados y policías". El mandatario se comprometió hoy a proseguir "con paso firme" su programa de reformas, mientras justificó la actuación de las fuerzas de seguridad que cumplen el "deber del Estado" de proteger a los ciudadanos de "los forajidos" que se dedican a "aterrorizar a la población".
En tanto, agentes del servicio secreto se llevaron anoche al líder opositor y médico Walid al Bunni junto a sus dos hijos y se desconoce su paradero, según informaron los activistas sirios en Líbano. Al Bunni ya pasó varias veces por la cárcel por su implicación en la defensa de los derechos humanos. De acuerdo a datos del Observatorio de Derechos Humanos, desde el comienzo de las protestas el resultado de la represión desatada asciende a 2 mil asesinados, 100 mil desplazados, 15 mil refugiados (en Turquía, Jordania y Líbano), y más de 100 mil heridos.
Ayer el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, se mostró "alarmado" por la escalada de violencia de los últimos días en Siria y afirmó que así se lo hizo saber a Assad en una conversación telefónica. El secretario general de la ONU exigió al presidente sirio que detenga "de manera inmediata" el uso de fuerza militar contra la población civil, según informa un comunicado hecho público por la oficina de prensa de la ONU.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux