El ministro de Fomento, José Blanco, explicó que la reducción del IVA es una medida "excepcional y temporal", que estará en vigor hasta el próximo 31 de diciembre y cuyo objetivo consiste en reducir la cantidad de viviendas nuevas sin vender y crear más empleos en el sector de la construcción.

Según el gobierno, el aumento del pago a cuenta del impuesto de sociedades permitirá ingresar en las arcas públicas unos 2.500 millones de euros. Además, obligará a venta obligatoria de genéricos en farmacias, lo que se traducirá en un ahorro estimado de 2.400 millones de euros.

Para disminuir el gasto farmacéutico también se reducirá en un 15 por ciento el precio de los medicamentos con más de diez años en el mercado y para los que aún no existan genéricos.

Por su parte, la ministra de Economía, Elena Salgado, indicó que la decisión de incrementar el pago adelantado de este gravamen afectara a unas 3.900 empresas, cuya facturación supera los 20 millones de euros anuales. Además precisó que las empresas que facturan entre 20 y 60 millones pagarán un impuesto del 24 por ciento en los llamados pagos a cuenta. Este gravamen será del 27 por ciento para las empresas que tienen una cifra de negocio de más de 60 millones de euros.

Además, Salgado apuntó contra las "comunidades más avanzadas" como las responsables de haber "alimentado las nuevas turbulencias financieras" que afectan a la zona euro. "Lo que se puede hacer es examinar en qué momento se han producido las mayores turbulencias, por desconfianza, noticias, anticipos de impuestos, falta de decisiones", dijo.