De las dos mil nuevas casas, 1.650 serán edificadas en Jerusalén y otras al sur de Belén, que será el primer sitio para el cual los palestinos pedirán a la agencia de la ONU la definición de Patrimonio de la Humanidad. La Autoridad Nacional Palestina (ANP) estimó por ese motivo que Israel "acelera la destrucción del proceso de paz", aparte de definir como "inhumana" la resolución de ese país de congelar de manera temporal la transferencia de fondos a la ANP.

El congelamiento de los fondos significa "robar el dinero al pueblo palestino", aseguró el portavoz del presidente Mahmud Abbas (Abu Mazen), Nabil Abu Rudeina. Entretanto, la ANP evaluaba pedir la adhesión a otras agencias de Naciones Unidas.

"Nos estamos preparando y estudiando los aspectos legales para cada organización especializada de Naciones Unidas, las otras organizaciones internacionales y los órganos de tratados internacionales", declaró en Ginebra Ibrahim Khraishi, embajador de la misión permanente de la ANP ante la ONU en esa ciudad.

El diplomático agregó que ninguna acción estaba prevista para los próximos días, pues el "tema principal es lo que sucederá en Nueva York", agregó. La candidatura de Palestina en la ONU fue formalmente presentada por el presidente Mahmud Abbas y deberá ser considerada el 11 de noviembre próximo por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Ginebra es sede de varias agencias especializada de la ONU, como la Organización Mundial de la Salud, la Organización Internacional del Trabajo y el Alto Comisionado para los Refugiados.

El ingreso de Palestina como Estado miembro de esa organización de Naciones Unidas, votada el lunes en París, fue saludada hoy por Irán, que sostuvo que se trata de un aporte internacional a los derechos palestinos.

En la votación del lunes hubo 52 abstenciones, entre ellas el de Italia, y 14 rechazos, como el de Alemania, además de Estados Unidos e Israel. Entre los 107 votos a favor estuvieron la mayoría de las naciones latinoamericanas, excepto México y Colombia que se abstuvieron y Panamá que votó en contra.

Estados Unidos anunció el lunes que retiraba su contribución de 60 millones de dólares a la UNESCO, mientras Netanyahu criticó a la ANP por "dar pasos unilaterales que infringen los compromisos de paz asumidos".