Luego de su encuentro con el presidente Napolitano, Berlusconi reconoció que la única salida de la crisis que paraliza a Italia es llamar a elecciones anticipadas, aunque admitió que lo "deberá decidir el jefe del Estado". Napolitano, por su parte, anunció que Berlusconi dimitirá una vez aprobados los presupuestos de 2012. "Es necesario hacer el país, es necesario dar una respuesta a Europa y a los mercados", afirmó el primer ministro, y precisó que se inclina por la anticipación de las elecciones antes que por "un gobierno técnico" o formado por los actuales grupos de la oposición.

"Después de aprobar el Presupuesto presentaré mi dimisión, de manera que el jefe del Estado pueda comenzar las consultas y decidir sobre el futuro. No me corresponde a mí decidir qué tendrá que ocurrir, pero yo sólo veo la posibilidad de comicios anticipados porque en este momento el Parlamento está paralizado".

Berlusconi reconoció que su Gobierno no cuenta ya con la mayoría: "Tenemos que tomar nota de esa situación con realismo y preocuparnos por lo que ocurre en Italia y por lo que está sucediendo en los mercados. (...) Tenemos que preocuparnos de lo que sucede en los mercados financieros, que no creen que Italia sea capaz de aprobar las medidas que la UE nos ha pedido. Creo que ésta es la primera cosa que nos tiene que preocupar. Tenemos que demostrar a los mercados que vamos en serio, lo más importante es el bien del país", agregó.

La maxienmienda a Ley de Estabilidad (Ley de Presupuesto), que contiene algunas de las medidas económicas exigidas por la UE para superar la crisis financiera italiana, será presentada mañana por el Gobierno en el Senado y las votaciones se llevarán a cabo la semana próxima, según afirmó el relator del proyecto, Massimo Garavaglia, de la Liga Norte, quien descuenta su aprobación en la Cámara alta.

Según Garavaglia, los presupuestos con la maxienmienda podrán estar aprobados a finales de noviembre, tras lo cual Berlusconi presentaría su dimisión al jefe del Estado, lo que no excluye la posibilidad de que se le vuelva a encargar la formación de un nuevo Gobierno.

Mientras tanto, por segundo día consecutivo, la prima de riesgo de Italia alcanzó hoy un nuevo máximo histórico, con 495 puntos básicos sobre el bono alemán, y se sitúa en niveles que imposibilitan financiar la economía con normalidad. La rentabilidad de los bonos italianos a 10 años se alzó también a la cifra récord del 6,74 por ciento, que acerca peligrosamente a Italia a las mismas cifras que determinaron las crisis de Grecia, Portugal e Irlanda.