Durante una entrevista radial, Lidia Papaleo subrayó la importancia de haber declarado en la causa que investiga delitos de lesa humanidad en el denominado Circuito Camps: "La exposición de ayer era muy importante por estar en un ámbito donde estábamos juntos todos, el pasado más doloroso, los abogados de ese pasado, la gente que formó parte de la tortura, mis torturadores estaban también, estaba el público que yo no lo vi ni sabía que estaba, porque no lo miré".

Además, insistió que "ayer fue un día muy especial, donde pude volver a transmitir mi testimonio y quedarme tranquila sabiendo que he cumplido ya indefectiblemente, es decir, que esto no vuelve para atrás", aseguró que sus palabras también "se adscriben a la causa de Papel Prensa" y auguró que ahora "va sí a salir a la luz no sólo los militares, los torturadores, que son gente que fueron utilizados", sino también "quienes fueron los que realmente gestaron, los civiles que capitalizaron todos estos dolores nuestros".

Además, reiteró que recuerda "más la mirada de (el CEO del Grupo Clarín, Héctor) Magnetto" que la de su secuestrador, y aseguró que el empresario le dijo que tenía que vender Papel Prensa "porque corría riesgo" su vida y la de su hija. "Cuando nosotros vendimos obligados este bien que era muy importante, Papel Prensa, y que sigue siendo un bien muy importante para el país, no sólo se estaba vendiendo un bien, sino que se estaba secuestrando, se estaba excluyendo de la vida a una familia, una gran familia y una cantidad enorme de gente que vivió toda esta injusticia", concluyó.