18:20 › A PUESTOS CERRADOS
En el segundo día de paro del Sindicato de Vendedores de Diarios y Revistas (Sivendia), el titular del gremio, Omar Plaini, advirtió que la cúpula del gremio analizará la posibilidad de repetir el fin de semana próximo la huelga de 48 horas en reclamo de un porcentaje mayor del precio de tapa. Además, los trabajadores del sector bloquearon las plantas impresoras de Clarín y La Nación, ambas ubicadas en el barrio de Barracas, para impedir que salieran los camiones que distribuyen los diarios.
El dirigente gremial señaló que "si no se accede a nuestro reclamo respecto de la devolución de lo que nos arrebataron unilateral y arbitrariamente, que es el 20 por ciento de nuestro ingreso", el próximo viernes habrá una asamblea en la que se analizará "un plan de lucha para profundizar la medida de fuerza". El Sivendia reclama un aumento del porcentaje que reciben sobre el precio de tapa de los periódicos ya que, según el sindicato, desde 2001 las ventas cayeron un 45 por ciento.
Plaini indicó que "el paro es en respuesta a la negación que tienen al diálogo estos grupos acostumbrados a imponer", al tiempo que aclaró que otros diarios que restituyeron el porcentaje reclamado.
El titular del sindicato también criticó que mientras se sostiene la medida de fuerza "nos encontramos otra vez con la provocación del grupo Clarín, conjuntamente con La Nación y Perfil, que violentaron el decreto promulgado por la Presidenta y salieron a regalar diarios con mano de obra esclava", en referencia a la norma que regula la actividad y modifica el decreto 1.025 del 2000, que quitaba la exclusividad de la venta en la vía pública al canillita.
En ese sentido, el sindicalista apuntó que "si pueden regalar los diarios, quiere decir que sus finanzas están muy bien" y explicó que "los vendedores de diarios estamos atados al precio de tapa, pero hoy el 70 por ciento de los ingresos de las publicaciones dependen de la pauta publicitaria, de la que nosotros no participamos".
"Ellos pueden planchar el precio de tapa porque sus ingresos están basados en la publicidad", remarcó Plaini y detalló: "Ellos facturan los adicionales, como los famosos alimentos para perros, desodorantes, shampoo y gaseosas, a costa del canillita. Históricamente cargábamos entre 80 y 100 diarios en un canasto, pero hoy no podemos llevar más de 30 por la cantidad de inserts y pauta publicitaria con que vienen".
Por último, el titular del sindicato de canillitas remarcó que "estos diarios crecieron por la eficiencia de nuestro trabajo" y aseguró que "el paro no es contra los ciudadanos, que son nuestros clientes".
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