Moyano consideró que lo que ocurre con Camioneros es "un ataque directo al sistema de salud de los trabajadores". La movilización de los afiliados al gremio comenzó en las primeras horas de la mañana sobre la 9 de Julio, sin interrumpir el paso del Metrobus. Por su parte, el secretario adjunto del gremio, Pablo Moyano, advirtió que la protesta no afectaría a los camiones de caudales ni a la recolección de basura.

Durante la manifestación, Hugo Moyano acusó al gobierno de buscar "terminar con las obras sociales sindicales, especialmente con las de camioneros" con quienes aseguró "la deuda del Estado Nacional asciende a 955.580.431 pesos". En ese marco, se refirió al escenario electoral al sentenciar que "el 27 de octubre tenemos la gran oportunidad de decirle basta a la soberbia del gobierno, no les voy a decir a quién hay que votar, pero ya sabemos a quién no votar".

El titular de la CGT Azopardo acusó a la Superintendencia de Salud, a cargo de Liliana Korenfel, de llevar a los camioneros a "una situación insostenible con un endeudamiento progresivo que nos hace entrar en riesgo de cesación de pagos, con las graves consecuencias de no poder seguir prestando cobertura de salud a los trabajadores". Momentos antes, alrededor de las 10, una delegación de camioneros con sus abogados, entregaron en la mesa de entradas de la Superintendencia de Salud un petitorio con los reclamos de del gremio.