"El programa nuclear de Irán (...) debe tener exclusivamente fines pacíficos. Quisiera declarar aquí de manera abierta y sin ambigüedades, éste ha sido siempre y será el objetivo de Irán", insistió el jefe de Estado.

En su primer discurso ante la Asamblea General de la ONU, el mandatario de Irán sostuvo que "las armas nucleares no tienen lugar alguno en la doctrina de defensa y seguridad de Irán", por lo que subrayó que está dispuesto a "trabajar en todos los áreas de la multilateralidad". "Creemos que no hay soluciones violentas para la crisis mundial", sentenció.

Rohani indicó que su país ha logrado manejar la tecnología nuclear, inclusive el uranio, que ha alcanzado la escala industrial. "Por lo tanto es una ilusión, y extremadamente poco realista, suponer que la naturaleza pacífica del programa nuclear de Irán puede garantizarse impidiendo el programa a través de la presión ilegítima", indicó.

El presidente denunció que las sanciones impuestas por la Unión Europea (UE) y Estados Unidos a Irán representan una violación a los derechos del pueblo iraní al desarrollo, la salud y la educación. Rohani consideró que Irán es una "potencia regional que actúa responsablemente y está dispuesta a cooperar con otros actores responsables".

El mandatario dijo que escuchó "atentamente" el discurso del presidente estadounidense Barack Obama ante la Asamblea de la ONU. "En concordancia con la voluntad política del liderazgo en Estados Unidos y con la esperanza de que se abstenga de seguir los intereses de los grupos de presión belicistas, podemos lograr un marco para resolver nuestras diferencias", apuntó.