Los expertos de esa área sobre infancia de las Naciones Unidas exigieron al Vaticano que se involucre a las víctimas y que haya regulaciones vinculantes en el derecho canónico que protejan mejor a los niños en todas las instituciones católicas del mundo.

"El Comité está gravemente preocupado porque la Santa Sede no haya reconocido el alcance de los crímenes cometidos y no haya tomado las medidas necesarias para abordar los casos de abusos sexuales a niños y protegerlos", indica el grupo de la ONU, que critica que esta política llevó a que los abusos continuaran.

También llama a la Iglesia a involucrar a las víctimas y las instituciones internacionales de derechos humanos en el trabajo de la comisión vaticana que investiga los crímenes, creada en diciembre. Asimismo, a hacer públicas sus conclusiones, a dar a conocer los archivos secretos sobre los abusadores y sobre aquellos que los protegieron dentro de la Iglesia.

El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, rechazó las críticas y anunció que en los próximos "días o semanas" explicará el funcionamiento de la comisión creada para prevenirlos.

"Es un asunto sobre el que la Iglesia ha trabajado y trabaja; ha sido un duro banco de prueba ", aseguró el religioso, quien recordó que hay una comisión creada por el papa Francisco para afrontar los casos de abusos a menores por parte de clérigos en un marco de "tolerancia cero".

"Se trata de un asunto sobre el que el Vaticano tiene que responder a preguntas y a ataques, que a veces son muy ideológicas o parciales", añadió.

Por su parte, el observador vaticano en Naciones Unidas, Silvano María Tomasi, manifestó su "sorpresa" por la acusación y aseguró que el informe no tuvo en consideración las explicaciones de la Santa Sede y que parece "como si estuviera ya preparado con antelación" a ese hecho.