El equipo dirigido por el italiano Carlo Ancelotti recobró la vida en el tercer minuto de descuento del tiempo regular, gracias a un gol agónico de Sergio Ramos que le permitió disponer de media hora más para revertir el resultado. El Atlético, que hasta el minuto 93 era campeón gracias al gol del uruguayo Diego Godín a los 36 minutos, volvió a quedarse en las puertas de la gloria continental y revivió los fantasmas de 1974, cuando perdió su única final anterior de la Copa de Europa.

El jugador de la Selección argentina Angel Di María fue decisivo en la consagración del Real. Desequilibrante por el sector izquierdo del ataque "Merengue", gestó la jugada en el gol del galés Gareth Bale, que significó la ruptura de la paridad (1-1) en el juego, en un momento clave del segundo tiempo del alargue.

Después, el brasileño Marcelo y Cristiano Ronaldo, de penal, cerraron el triunfo y así, el Real Madrid conquistó su décima "Orejona". Simeone, quien se fue expulsado sobre el final por discutir con el defensor francés Raphael Varane, cerró una exitosa temporada, por haberse quedado con la Liga española y haber llegado a la final de la Champions, en la que estuvo a dos minutos de ganarla y hacer todavía más historia en el club del que ya es un símbolo.

El otro argentino en cancha fue el mediocampista del Atlético de Madrid José Sosa, quien ingresó a los 20 minutos del segundo período. El partido fue parejo en el comienzo, con el Real Madrid tomando la iniciativa y el Atlético buscando acertar alguna réplica.

Los "Colchoneros" tuvieron una mala noticia a los 9 minutos del primer tiempo, con la lesión, otra vez, del delantero Diego Costa, quien también había salido el último sábado en el partido decisivo de la Liga española contra el Barcelona.

A los 36 minutos, el uruguayo Diego Godín marcó de cabeza, tras un grueso error del arquero Iker Casillas, y puso en ventaja al Atlético. En el segundo capítulo, el Real Madrid lo siguió buscando y a medida que pasaron los minutos, el Atlético se fue replegando cada vez más, dando muestra también del cansancio por la acumulación de tantos partidos.

Fue así como el Real cada vez llegaba más cerca al arquero belga Courtois y, a los 48, en el tercer minuto adicional, Sergio Ramos, de cabeza, marcó el 1-1, para exigir el alargue.

Recién en el segundo tiempo extra, el Real Madrid destrabó el juego y fue gracias al argentino Di María, quien encaró por izquierda, se metió en el área y tras su disparo, que sacó el arquero belga, el balón le cayó a Bale, jugador que de cabeza marcó el 2-1. Desde entonces y hasta el final fue todo del "Merengue", que se terminó floreando ante un equipo que sufrió los goles de Marcelo y de Ronaldo, de penal.

El entrenador del Atleti, Diego Simeone, dijo tras la final que está orgulloso de sus jugadores y que cree que el equipo cayó "con la cabeza alta". "El fútbol es maravilloso por esto. Ganar es lo más importante, pero también lo es el aplauso, el apoyo de la gente y estas cosas me hacen ver que no sólo existe la victoria. A los jugadores les dije que lo dimos todo y que por eso terminamos con la cabeza alta, para preparar ya la temporada que viene", dijo el "Cholo" en una conferencia de prensa en la que fue recibido por un fuerte aplauso de los periodistas.