13:07 › UNA CRISIS REAL
Tras las masivas movilizaciones en toda España a favor de una III República, el presidente Mariano Rajoy confirmó que el gobierno aprobó la ley con la que se hará efectiva la abdicación de Juan Carlos, y anunció que la proclamación de Felipe como nuevo rey será el 18 de junio, cuando las Cortes culminen el proceso parlamentario. "Todo el mundo tiene derecho a pedir un cambio de las reglas del juego, pero con los instrumentos de la legislación", sentenció.
"Creo que la monarquía tiene en España un apoyo muy mayoritario y si a alguien no le gusta que plantee una reforma de la Constitución", remarcó, como respuesta a las movilizaciones que miles de españoles protagonizaron en decenas de ciudades exigiendo un referéndum que determine la conformación de un estado republicano, en reemplazo del monárquico vigente después de la caída de la dictadura de Francisco Franco.
Las manifestaciones fueron apoyadas –y en algunos casos impulsadas- por dirigentes políticos y referentes de organizaciones sociales, a quienes Rayoy les recordó que la monarquía está incorporada a la Constitución que se aprobó "de forma mayoritaria".
La reforma de la que hablaba Rajoy tendría que presentarse en el Congreso de los Diputados, donde su Partido Popular (PP) tiene una holgada mayoría absoluta que la haría fracasar. En cambio, la Izquierda Unida (IU), la tercera fuerza política de ámbito nacional, volvió a convocar a unirse a toda la izquierda en el reclamo del referéndum.
En cambio, el líder del Partido Socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, defendió hoy la monarquía pese a las "hondas raíces republicanas" que su formación ha tenido históricamente. El PSOE formó parte del pacto constitucional en el que en la transición de la dictadura a la democracia se fijó la monarquía como forma de Estado, dijo el jefe del principal partido de la oposición.
"Ha permitido 35 años de desarrollo político marcados por el consenso, la convivencia y el civismo", señaló el socialista, que no ve peligro en las protestas que reivindican la república: "Son una vía de expresión", dijo, están "dentro del funcionamiento normal de una democracia".
En tanto, Jesús Posada, titular del Congreso de los Diputados, confirmó que la proclamación como rey de España del aún príncipe Felipe tendrá lugar a partir del 18 de junio. “Lo hablaremos con la Casa Real y con el gobierno porque esa decisión no me compete", dijo.
El Congreso de los Diputados, previsiblemente la semana que viene, y el Senado, la siguiente, tienen que aprobar por mayoría absoluta la ley que regula la abdicación y que el gobierno de Mariano Rajoy enviará esta tarde al Parlamento. El jefe del Ejecutivo convocó hoy un consejo de ministros extraordinario para aprobar la norma que regulará la abdicación.
Con ese texto arranca un proceso sin precedentes en España, acompañado por las protestas que exigen un referéndum para que los españoles decidan entre monarquía y república. Hasta que las dos cámaras del Parlamento no aprueben la ley, no será efectiva la abdicación del monarca que dirigió la transición de la dictadura a la democracia tras la muerte de Francisco Franco en 1975 y que ha ocupado el trono español durante 39 años. Solo después podrá tener lugar la proclamación del nuevo monarca, que reinará como Felipe VI.
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