La sanción contra el alemán Franz Beckenbauer, campeón mundial como jugador y entrenador, es de caracter provinsional y fue dispuesta por consejo del jefe de la cámara de instrucción de la comisión de ética de la FIFA, Michael Garcia, que está en la recta final de su investigación sobre la polémica votación de las sedes de los Mundiales de 2018 y 2022.

"La supuesta infracción se debe a la falta de cooperación de Beckenbauer con una investigación de la comisión de ética, a pesar de que se le requirió su ayuda en reiteradas ocasiones, incluyendo pedidos de que aportara información durante una entrevista en persona o respondiera por escrito a preguntas que se le enviaron en inglés y alemán", explicó el órgano rector del fútbol.

Beckenbauer rechazó categóricamente estar involucrado en el escándalo: "Tengo cero cosas que ocultar", dijo el presidente de honor del Bayern Múnich en una entrevista publicada por el diario alemán Bild. "Lo digo con sinceridad: no entiendo toda esta excitación. Ya dije suficientes veces que soy el interlocutor equivocado para el tema corrupción", afirmó.

"En la FIFA sólo tengo un status de consultor, ya no soy miembro del comité ejecutivo y, por lo tanto, no estoy obligado a hablar con el señor García", dijo el alemán, quien fue miembro del comité ejecutivo que eligió a Rusia y Qatar como sedes mundialistas de 2018 y 2022, respectivamente, pero nunca reveló a quién votó.