Malcorra afirmó que le "sorprende" la polémica sobre los 22 minutos que duró la entrevista en la Biblioteca Pontificia, no en la Residencia de Santa Marta donde Francisco recibe habitualmente a los mandatarios. En este sentido, relativizó que "el cronómetro mida la eficiencia o no" de la reunión y remarcó que Mauricio Macri "es una persona que no abunda en palabras".

No obstante, sostuvo que "la conversación privada entre su Santidad y el Presidente cubrió todas las cuestiones que esperábamos que se cubrieran, son cuestiones que hacen al país, pero que hacen a interés de su Santidad en el mundo".

En una entrevista por Radio La Red, la jefa de la diplomacia argentina fue consultada sobre la posibilidad de el Papa tuviera algún cuestionamiento político sobre la figura del Presidente, a lo que respondió: "No se me ocurre que el Papa Francisco tenga un prejuicio ideológico".

Susana Malcorra aseguró que "El Papa Francisco quería conversar con el Presidente para comparar notas de la gestión y para entender cómo el Gobierno, que ha puesto como primer objetivo la eliminación de la pobreza, puede avanzar en algo tan importante”.

También reiteró que Bergoglio tiene interés en venir a la Argentina: “Visitará nuestro país lo antes posible". Ratificó que hablaron de ello con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, quien expresó su deseo de acompañar a Su Santidad pronto ya que él no conoce Argentina”.

Además, la canciller también destacó la importancia de la anunciada visita del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a la Argentina, la que a su entender "demuestra que estamos teniendo una interlocución muy seria y muy variada, pero también significa una señal para el sector privado y las áreas que tenemos que avanzar para que tengan un impacto en la gente".