"A las 5 de la mañana agarramos, en el barrio de Belgrano, a un auto con seis personas con bombas molotov, se tiende a pensar que van hacia Plaza de Mayo", aseguró la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en diálogo con radio La Red, en la previa del Tedeúm en la Catedral Metropolitana. Bullrich defendió así el fuerte operativo de seguridad montado en los alrededores de la Plaza de Mayo e insitió: "Estamos ante una situación compleja (...) Los niveles de violencia son muy altos".

Tras las declaraciones de Bullrich, otro que intentó justificar el fuerte operativo de seguridad fue el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien dijo: "Se decidió vallar por seguridad. Acá hay un mecanismo de seguridad que se coordinó con el Gobierno de la Ciudad y con Nación. Acá no sé si hubo amenazas, siempre hay que estar precavidos".

Horas después, la Policía Federal desautorizó las presunciones de la ministra al informar que los detenidos eran "quemacoches" y no manifestantes que buscan infiltrarse en los festejos de Plaza de Mayo.

A través de un comunicado, la Policía Federal barrió cualquier duda sobre las intenciones de los detenidos al especificar que se produjeron en el momento en que los apresados intentaban prender fuego un Peugeot 408 en la intersección de O'Higgins y Arias.

Los hombres estaban junto a un taxi marca Renault Megane, en el que encontraron una bolsa plástica que contenía "mecheros caseros hechos con latas de gaseosa cortadas con estopa en su interior". También hallaron "una gomera de metal y bulones de rueda con una banda elástica que apretaba un papel blanco con la inscripción: 'Tenemos tu patente, esto recién empieza'".