Los hinchas presentes, alrededor de diez, además de otros veinte más serenos, fueron liderados por un personaje conocido como el "Colorado" Romero, a quien tiempo atrás se sindicaba como uno de los líderes de la hinchada pero que últimamente estuvo más retirado y pidió que no se lo identifique como "barrabrava" sino como "hincha de la vieja guardia".

Durante la práctica, una pelota cayó en manos de un hincha, Osmar Ferreyra le pidió que se la devolviera y el simpatizante le dijo: "Para qué la querés si tenés veinte al lado y no agarraste una el domingo", a lo cual el jugador respondió con un insulto.

Al terminar el trabajo, otro de los jugadores, Jonathan Bottinelli, encaró directamente a quien así se había dirigido a su compañero.

Ferreyra, uno de los hombres más cuestionados, había dirigido un gesto hacia los plateístas luego de la derrota por 7 a 1 ante Boca Juniors, el pasado domingo.

Ante la actitud de Bottinelli, se generó el forcejeo con corridas e insultos del que participaron varios jugadores con hinchas que habían accedido a una zona habitualmente vedada para los particulares y tuvieron que intervenir otras personas, además de los encargados de seguridad, para calmar los ánimos.

Después, el plantel debió recorrer unos veinticinco metros hasta llegar a los vestuarios mientras los hinchas presentes, del otro lado de un alambrado, insultaban a algunos de ellos, principalmente al ex jugador de River.

El hincha que inició el incidente con Ferreyra dialogó después con los periodistas, identificándose como Mariano Pablo Serantes, y dijo: "No soy barrabrava, pertenezco al sector de prensa de la Subcomisión del Hincha. Vine a recabar información y a escuchar explicaciones de la tragedia (sic). Vine solo y me voy solo. Me lastima la falta de respeto de empleados de mi club como la que tuvo Ferreyra, que encima no dio la cara, porque no se detuvo a hablar cuando se lo pedí".

El "Colorado" Romero, por su parte, habló con el entrenador alterno Sergio Batista y logró que Ruggeri accediera a una reunión con cuatro de los hinchas dentro del vestuario.

Trascendió que los presentes no pensaron en reclamarle la renuncia al director técnico, como el mismo grupo hiciera tiempo atrás con Néstor Gorosito, sino en exigir "un cambio de actitud y borrar a jugadores que no sientan la camisetas, para que no se repitan papelones".

Ya en cuestiones estrictamente futbolísticas, el "Colorado" opinó que "a este Boca no se le puede jugar con línea de tres, sino con línea de cinco y dos arqueros".

Alrededor de cincuenta trabajadores de prensa, número inusual para los entrenamientos de San Lorenzo de los días martes, se dio cita para presenciar el trabajo, el cual estaba previsto para las 10 pero comenzó con 35 minutos de retraso, porque plantel y cuerpo técnico tuvieron previamente, en los vestuarios, una larga charla.

También se conoció el disgusto generalizado por las características del programa que anoche condujo, por Canal 13, Marcelo Tinelli, el cual estuvo íntegramente dedicado a la goleada de Boca.

El famoso auxiliar Miguel Di Lorenzo, conocido como "Galíndez", exteriorizó el descontento de todos, con insultos dirigidos al conductor, de conocida filiación sanlorencista.

Fuente: DYN