"No nos quieran, algunos pícaros, asustar con la inflación porque viene todo bien", advirtió el jefe de Estado, ofuscado por los análisis reflejados en los diarios respecto a los alcances de la nueva ronda de discusión salarial de este año que acaba de comenzar en las distintas ramas de actividad.

El presidente también anunció que la participación de los trabajadores en el Producto Bruto Interno "está llegando a 39 por ciento", aunque reconoció que "todavía estamos lejos de la época del general Perón cuando era de 50 por ciento".

Reiteró, además, que el índice de desocupación del último trimestre del 2006 es de un dígito "luego de haber llegado al 30 por ciento".

Kirchner habló de la cuestión salarial durante un acto de llegada del tercer envío de nuevo material rodante que se adquirió a Portugal para mejorar la red ferroviaria nacional y justo cuando el gremio de los maquinistas, la Fraternidad, se dispone hoy a abrir el debate en paritarias reclamando un piso de aumento del 20 por ciento.

En la Dársena Norte del Puerto, estuvo acompañado por el vicepresidente Daniel Scioli, candidato a gobernador bonaerense por el oficialismo; el jefe del gobierno porteño y postulante a la reelección, Jorge Telerman, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido; el secretario de Transporte, Ricardo Jaime, y el titular del gremio La Fraternidad, Omar Maturana.

"Algunos llenan páginas y páginas de diarios de cómo se va a discutir el salario de los trabajadores. Muchos hablan de la libertad económica, pero pareciera ser que no puede haber libertad para discutir, con responsabilidad y seriedad, los salarios de trabajadores. Los salarios de los trabajadores se discuten con libertad en las paritarias como corresponden", sentenció.

Se quejó porque "hay intereses que son extremadamente egoístas y que quieren crecer nada más que ellos", aunque resaltó que "también hay empresarios que la tienen perfectamente clara de que esta Argentina se tiene que construir entre todos".

"Yo no tengo un pie en un lado y otro pie en el otro. Tengo los dos pies en la construcción de la Argentina industrial, en la Argentina productiva y del trabajo nacional, en la Argentina donde vuelva a ser lo que merece ser en el mundo", aseveró.

También reiteró que se siente "compenetrado totalmente con los trabajadores, la clase media y los empresarios nacionales, con la recuperación de la industria nacional, la autoestima y la dignidad".