"Hay 15 millones de argentinos en condiciones de pasarse a la jubilación estatal, lo tienen que hacer con tranquilidad, piénsenlo bien, nosotros no vamos a cortar la libertad como se hizo en la década del '90", sostuvo Kirchner, tras calificar de "perverso" al sistema de jubilación privada implementado durante el gobierno menemista.

Durante un acto llevado a cabo en la Casa Rosada, el jefe de Estado anunció su propio traspaso al sistema jubilatorio estatal, y sostuvo que ese "no es un acto de demagogia" porque afirmó "creer" en la jubilación estatal, al tiempo que advirtió que el sistema de AFJPs "destruyó el sistema provisional nacional y el de las provincias".

Dijo que las autoridades crearon el sistema privado por "los malos manejos de los fondos de los trabajadores" y con el argumento de que se crearía un mercado de capitales, pero acusó a las AFJP y bancos asociados de "tomar los fondos y aprovechar la situación de déficit para dedicarse a prestar al Estado a tasas totalmente altas".

Por su parte, el secretario de Seguridad Social, Sergio Massa, sostuvo que "Kirchner como muchos argentinos fue víctima de la trampa del artículo 30 (de la ley previsional del '94)", al recordar que hasta la actual reforma los indecisos eran distribuidos entre las administradoras del sistema privado vencido el plazo de elección.

Estos trabajadores, como los que manifestaron explícitamente su decisión de ingresar al sistema de jubilación privada, no podían hasta ahora regresar al sistema estatal de reparto.

En la ceremonia, Massa presentó el formulario de la ANSeS para que el primer mandatario pueda iniciar sus trámites de traspaso a la jubilación estatal.

También pronunciaron sus discursos, los titulares de la CGT, Hugo Moyano, y de la CTA, Hugo Yasky, quienes celebraron la posibilidad de la libre opción jubilatoria y exhortaron a los trabajadores a traspasarse al régimen de reparto "porque es el que garantiza una jubilación digna".

Moyano y Yasky coincidieron en que desde los sindicatos que representan resistieron desde el comienzo la implementación del sistema de AFJPs y mencionaron la discusión que el futuro del régimen provisional privado en Chile que fue modelo del argentino.

"Se intentaba chantajear a los trabajadores. Había una tendencia arrasadora de contar las bondades de la jubilación privada. Nos hacían acordar cuando nos vendían espejitos de colores. Y en aquel entonces, muchos empresarios se hacían los distraídos porque les convenía", denunció el titular de la CGT.

El líder de la CTA habló de "estafa" y prometió "jugar activamente en la campaña (para el traspaso) que es también una lucha cultural porque penetró ese discurso de que todo lo privado era mejor que lo público, del sálvese quien pueda".

Durante el acto, las dos centrales obreras firmaron un acuerdo para asesorar a los trabajadores sobre la libre opción jubilatoria, y también las autoridades del Correo Argentino y de OCA para llevar en forma gratuita los formularios a la ANSeS.

Estuvieron presentes en el acto, además de Kirchner, Massa y los sindicalistas, el titular de la Cámara de Diputados, Alberto Balestrini, los ministros Carlos Tomada (Trabajo) y Aníbal Fernández (Interior) y los secretarios general de la Presidencia, Oscar Parrilla, y de Turismo, Enrique Meyer, entre otros.