El hecho, que recién se conoció esta mañana cuando docentes y alumnos llegaron al establecimiento, generó indignación y determinó que se suspendieran las clases para esta jornada, hasta que se revisen todos los cielorasos de todo el colegio, que fueron realizados por la misma empresa y al mismo tiempo, y se garantice la seguridad de todos.

El "Mariano Acosta", ubicado en Moreno y Urquiza, adonde concurren 1.800 alumnos de jardín de infantes, primario y secundario, estuvo siendo refaccionado en los últimos dos años y ya las obras se habían dado por concluídas.

Sin embargo, en algún momento de ayer domingo el cieloraso de un aula número 3 de la planta baja, donde se dicta el cuarto grado se desprendió y cayó entero, quedando colgado de un extremo y aplastando a pupitres, en el otro.

Debido a que las obras estaban recién terminadas tampoco se había habilitado el establecimiento para que se votara, lo cual también fue providencial.

Una madre envió hoy una carta al rector, Gustavo Lesbergueris, en la cual destaca que "venimos desde hace tiempo dejando asentado por distintos medios las irregularidades de la obra, como inundaciones en el subsuelo, filtraciones de agua en distintas aulas, anegamientos de patios, y teniendo en cuenta que la empresa constructora estaba por dar por finalizada la obra

cuando uno no puede opinar lo mismo, nos preguntamos quién va a fiscalizar que tanto los materiales como la mano de obra han sido los correctos"

El docente Eugenio Rato dijo al canal de noticias TN que lo que pasó fue "un milagro, porque podríamos haber estado dando clases nosotros y el domingo podría haber estado votando alguien" al momento del accidente, al tiempo que destacó que "no se votó en la escuela por razones de seguridad" justamente por lo reciente de las obras de remodelación.

Informó que "los docentes, el cuerpo directivo y el centro de estudiantes decidimos no dar clases hasta que no se revisen todos los techos, porque la empresa que los construyó es la misma, y nos tienen que garantizar de que esto no volverá a pasar".

Por su parte, Felipe Vegarreta, del centro de estudiantes, dijo sentir "una profunda indignación" por el accidente ocurrido, afirmó que mientras se desarrollaron las obras de refacción del edificio hubo muchos inconvenientes, como fallas en los sistemas de calefacción, y afirmó estar "agradecido porque no pasó nada: hoy se salvaron vidas".

Se supo además que el arquitecto que realizó la obra se acercó esta mañana al "Mariano Acosta" para revisar los daños y determinar sus causas, así como para iniciar las reparaciones.