Ríos reveló que en el encuentro mantenido ayer con el jefe de Estado en la Casa Rosada, la primera dama "entró a saludar, dijo 'buenas noches, te felicito, es un honor para el género', se quedó medio minuto más porque lo reconoció al vicegobernador (electo, Carlos Bassanetti), que había sido juez federal en (Río) Gallegos cuando Kirchner era gobernador, y se retiró".

En declaraciones a radio Continental, analizó que los encuentros mantenidos con el Presidente y con el gobernador Hugo Cóccaro, al que derrotó el pasado domingo en el ballottage por cinco puntos (52 por ciento a 47 por ciento), "son pasos hacia una institucionalidad adulta".

La primera mandataria mujer en la historia del país, que asumirá el 10 de enero, negó que haya hablado "bien" de Kirchner tras ganar la segunda vuelta electoral y aclaró que "lo único que hice fue una observación de la realidad, que tengo la obligación de tenerla", cuando dijo que era "una persona muy querida" en Tierra del Fuego.

Cuando fue consultada si al mandatario lo querían "igual que a la pingüina", en referencia a la primera dama, opinó: "Me parece que hay diferencias, me parece que lo quieren más al Presidente".

Además, interrogada si era la salvadora de Carrió frente a la crisis del ARI, indicó: "Yo no creo que Elisa necesita de mi salvavidas, le sobra paño para salvarse sola".

Rechazó también que sea la "única" que puede ponerle límites a la fundadora del partido y candidata presidencial por la Coalición Cívica, con quien, "si Dios quiere", acotó, se encontrará hoy en Rosario.

Al respecto, comentó que será "una reunión habitual, cuando estoy en Buenos Aires nos reunimos dos o tres veces por semana, hablamos mucho por teléfono, es una reunión más entre dos dirigentes políticas y dos amigas".

Ríos añadió que le comentó a Kirchner la "peligrosa" y "preocupante" situación en la Provincia por los espionajes telefónicos y grabación de videos clandestinos, como el sufrido por Rosana Bertone, compañera de fórmula de Cóccaro, difundido poco ante la elección del 17 de junio.

"Más allá de que quien no tiene nada que ocultar no tiene nada de qué preocuparse, lo cierto es que uno no se puede acostumbrar a que la invasión de la privacidad sea lo natural, por el contrario, me parece que hay que combatirlo, que terminarlo", sostuvo.

Manifestó que "temor no tengo porque no tengo nada que ocultar, se van a morir aburriéndose", pero lamentó que "de algún modo, descubrir delitos a través de métodos ilegales está demostrando que los métodos legales y los mecanismos institucionales no están funcionando a la hora de establecer los controles".

Finalmente, advirtió que "lo que nosotros no vamos a hacer es asumir el 10 de enero con los ojos cerrados, con compromisos asumidos que nosotros no conozcamos", por lo que "le hemos dicho al gobernador Cóccaro que nosotros no queremos que él no gestione en la transición, lo que no queremos es que comprometa recursos que tengan que ver con nuestra gestión".

Por lo tanto, definió que "un tema clave" y prioritario será el del control de la obra pública.