El sindicado como jefe de la barrabrava riverplatense, Adrián Rousseau, así como otros 97 acompañantes, fueron detenidos esta tarde en cercanías de la estación Scalabrini Ortiz, del ferrocarril Belgrano, cercana al club de Núñez, indicaron fuentes policiales.

Las detenciones tuvieron lugar cuando el grupo liderado por Rousseau y el que encabezan los hermanos Alan y William Schlenker, que no estaban en el lugar, estaban dispuestos a librar otro enfrentamiento por la conducción de los ’Borrachos del Tablón’.

En la estación de tren, la policía y la gendarmería, en un operativo conjunto y luego de un trabajo de inteligencia que les permitió detectar el lugar en que se habían "citado" ambos grupos (debajo del puente Angel Amadeo Labruna), detuvo a estos barrabravas riverplatenses antes que se concretara el enfrentamiento.

Entre los barras más conocidos, además de Rousseau se encontraba un joven al que apodan ’Colimba’ y cuyo nombre es Sergio Medina.

Oscar Morales, titular de la Comisaría 51, a cargo del operativo, indicó que los detenidos fueron trasladados a esa seccional.

Cuando vieron llegar a las fuerzas policiales y los gendarmes, casi medio centenar de barras lograron escaparse y uno de ellos, al intentar cruzar las vías se cayó, sufriendo la fractura del tobillo derecho.

Ya la semana anterior y en ocasión del encuentro ante Newell’s, cuando estos hinchas violentos se habían reunido para repartirse entradas en una casa de comidas rápidas cercana al Monumental, se habían registrado más detenciones.

Simultáneamente, cuando la hinchada de Vélez llegaba a la cancha en diez micros, algunos de los que viajaban descendieron de ellos y empezaron a arrojarles piedras a otros de River que iban caminando hacia el estadio. La cercana presencia policial los obligó a retornar a los ómnibus.

Por otra parte, en el estadio Ciudad de La Plata, hubo disturbios en la tribuna visitante, donde se encontraban los hinchas de Racing.

Un testigo de los hechos contó que “de golpe en el medio de la tribuna, donde estaba la barra, apareció un hincha con una ‘faca’ y quiso cortar a uno”.

Según este testigo, “cuando los demás barras se dieron cuenta se produjo una pelea”, que podría estar relacionada con la interna que hay entre los violentes de Racing, donde dos fracciones, La Guardia Imperial y Los del Morro, se disputan el poder de la tribuna.

Todo esto ocurrió cuando iban 15 minutos del segundo tiempo. Las peleas y las corridas finalizaron 10 minutos después, cuando el hombre que poseía el arma blanca pudo escapar de la tribuna.

Fuente: Télam