Mediante una resolución de 11 carillas, los camaristas Eduardo Freiler y Eduardo Farah también ratificaron el embargo de cien mil pesos en los bienes del ex ministro que decretó el juez federal Sergio Torres cuando lo procesó meses atrás.

El delito por el cual fue confirmado el procesamiento de Béliz es el previsto en el artículo 222 del Código Penal, que reprime con reclusión o prisión de uno a seis años al que "revelare secretos políticos o militares concernientes a la seguridad, a los medios de defensa o a las polìticas exteriores de la Nación".

La causa contra Béliz se inició a raíz de sus dichos en un reportaje televisivo concedido el 25 de julio de 2004 en el programa "Hora Clave", cuando exhibió la fotografía de Antonio "Jaime" Stiuso, un funcionario del área de contrainteligencia de la SIDE.

En esa ocasión, el ex ministro afirmó que "era bueno que todos conociéramos la cara de quien maneja en realidad dicha institución", en referencia a la central de inteligencia a la que atribuía "operaciones" en su contra.

Al refutar los argumentos de los abogados Oscar Rabinovich y Pablo Slonimski, defensores de Béliz, los camaristas afirmaron que "este actuar no puede justificarse en la creencia de que no se estaba ante una información confidencial".

Si bien admitieron que "es posible que alguien conociera el nombre" de Stiuso (por sus referencias y testimonio en el juicio oral por la "causa AMIA") "eso no significa que pudiera individualizar su fisonomía como sucedió alser exhibida la fotografía en la televisión".

Los magistrados dijeron que Béliz "expuso de modo público un secreto de Estado en el marco de un discurso plagado de referencias a múltiples delitos de acción pública" (las presuntas maniobras para desestabilizarlo) que, como funcionario público que era, debió haber denunciado en tiempo oportuno y ante las autoridades competentes".