El gobierno porteño emitió hoy el decreto que reglamenta esta suba, que había sido acordada en una audiencia pública el 2 de agosto pasado, en la cual se consensuó el incremento con el argumento de que las tarifas estaban muy desfasadas frente a los costos de ese servicio público.

La Dirección de Transporte porteña estimó que el aumento "permitirá mitigar los efectos de los incrementos sufridos, asegurando para los licenciatarios una rentabilidad razonable del servicio y para los usuarios el acceso a una prestación con estándares óptimos de calidad".

El secretario general del Sindicato de Conductores de Taxis, José Ibarra, remarcó que este incremento "llega tarde, hubiéramos estado de acuerdo con el 19% si se hubiera implementado en marzo del 2006, hoy tenemos un año y medio de retraso respecto a los costos reales".

Ibarra dijo que la actividad del taxi "no cuenta con el subsidio que sí tienen los otros transportes públicos, y esto nos perjudica notoriamente" y agregó: "nos sentaremos con las nuevas autoridades porteñas para readecuar las tarifas".

El dirigente precisó además que "implementar una audiencia pública para lo cual se debe demorar 60 o 70 días, contribuye a retrasar los porcentajes en relación con el aumento de los insumos" y agregó que el sueldo mínimo del chofer "se incrementará con este aumento de tarifas".

Por su parte, Luis Fernández, de la Asociación de Taxistas, coincidió en que el tema tarifario "no está cerrado porque es evidente que hay un defasaje ya que nuestros costos están dolarizados porque se manejan con productos derivados de petróleo".

Fernández destacó que su Asociación "está realizando una evaluación de la tarifa que tendría que regir de acuerdo a los costos actuales y que la van a presentar ante las nuevas autoridades porteñas".

Desde junio del 2003 este es el sexto aumento y las dos últimas actualizaciones ocurrieron en agosto del año pasado y en enero de este año.

Para fijar el monto de actualización, las partes consideraron el salario mínimo garantizado al chofer, las cargas y aportes patronales, el seguro de vida obligatorio, la tarjeta de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) y la patente, entre otras variables.