Según fuentes judiciales, el dato es compatible con el informe balístico recibido por el fiscal, Sandro Abraldes, de la Gendarmería que indica que los proyectiles de plomo extraídos del cuerpo de ambas víctimas pertenecía a "posta de munición múltiple", compatible con los cartuchos de Itaka que dispara la Federal. La pericia judicial recogió además en la zona donde actuó la policía esa jornada decenas de cartuchos rojos, correspondientes a munición de plomo, así como otros de color verde, correspondiente a posta de goma que son los autorizados para disturbios callejeros.

"La mayoría de los testigos coincide en que no había civiles armados y en que la que tiraba era la Policia Federal, aunque sólo un número menor aseveró que los tiros mortales fueron policiales", agregó otra fuente. La ausencia de civiles armados quita peso a la primera versión que sostenía que ambas victimas habían sido asesinados por armas "tumberas" de fabricación casera. En los mismos testimonios recogidos por la fisccalía se mencionó un pedido de interrupción de la represión hecha por los vecinos a los jefes policiales, tregua que duró 20 minutos, tras los cual se produjo la "cargaö que culminó con la muerte de Salgueiro y de Churapuña.

La Fiscalía tiene secuestradas más de dos centenares y medio de armas usadas esa tarde-noche por las policías Federal y Metropolitana, pero aun no fueron analizadas. Junto con las pericias hechas a las víctimas, la Fiscalía recibió las imágenes de los canales de televisión y los remitidos por la división de Asuntos Internos de la Federal, además de las cintas con las grabación de las comunicaciones de la policía, durante las cuales se imparten las órdenes operacionales.